Iglesias intentará mostrar un perfil de “estadista” en la moción y dejará a Montero el papel de azote de la corrupción

Como candidato de la moción y, por lo tanto, aspirante a sustituir a Rajoy en La Moncloa, Iglesias se ha marcado como objetivo dejar a un lado el carácter combativo que suele levantar ampollas entre sus adversarios políticos y, en esta ocasión, sacar a relucir un perfil 'presidencial', transmitiendo “madurez”, “seriedad” y “tranquilidad” a través de un discurso basado en propuestas.

Teniendo en cuenta que la moción no saldrá adelante por falta de apoyos, Podemos pretende conseguir que este debate sea entendido por la sociedad como un paso previo “en el camino para desalojar al PP del gobierno”. Sin embargo, son conscientes de los “enormes riesgos” que entraña en términos de credibilidad para ellos, tal y como reconoció el propio Iglesias ante la dirección estatal del partido durante su última reunión.

Para rentabilizar este debate y evitar que se vuelva en su contra, el líder del partido morado no quiere ser “el Iglesias que solo denuncia la corrupción sino el que analiza y explica los problemas estructurales de España y propone alternativas que van más allá de su partido”, según explican desde el equipo del secretario general.

Por ello, Iglesias basará su discurso en exponer un programa de Gobierno que apueste por “un nuevo contrato social para España” y propondrá “medidas en clave europea para que España gane protagonismo como potencia mediterránea y lidere una Europa del Sur que reivindique los derechos sociales y el Estado del bienestar como fundamento del proyecto europeo”.

PROPUESTAS SOBRE CATALUÑA

El secretario general de los 'morados' también hará hincapié en la situación de Cataluña y, según su equipo, “hará propuestas de estadista”. A este respecto, Podemos defiende que la única solución ante el “choque de trenes” entre el Gobierno y la Generalitat es la celebración de un referéndum pactado que garantice el derecho a decidir y sirva para construir “un proyecto común de España respetuoso con la plurinacionalidad”.

El líder de Podemos también utilizará como idea fuerza la necesidad de “recuperar diálogos de país” entre territorios, generaciones, empresarios y trabajadores, diálogos de género o entre el campo y la ciudad, en contraposición “al modelo de ruptura de los diálogos que”, según el grupo confederal, “representan el PP y sus aliados”

Por su parte, Montero asumirá el rol de “censura al Gobierno” y se encargará durante la que será la primera intervención del debate de enumerar los distintos casos de corrupción que afectan al PP y que les han llevado a presentar esta moción de censura para sacar al partido de Rajoy de unas instituciones que, a su juicio, está “parasitando”.

Según el partido morado, la portavoz parlamentaria “será dura señalando la situación insostenible de secuestro de las instituciones por parte del PP”, tal y como ya lleva haciendo desde hace semanas. De hecho, fue ella quien lideró el registro de la moción y la posterior comparecencia ante los medios, y la que anunció públicamente que Iglesias sería el candidato a sustituir a Rajoy en La Moncloa.

Al margen de los discursos de Irene Montero y Pablo Iglesias, que serán los primeros en intervenir, en el curso del debate también participarán sus socios de Unidos Podemos: Alberto Garzón, de IU; Xavier Domènech, de En Comú; y Antón Gómez Reino, de En Marea.