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El Supremo se reunirá este domingo para decidir si Puigdemont, Comín y Ponsatí pueden presentarse el 26M

Puigdemont y Comín.

Marcos Pinheiro / Marta Barandela

El juzgado de lo Contencioso-Administrativo Nº 2 de Madrid, junto con los juzgados de lo Contencioso 9 y 21, ha decidido elevar al Tribunal Supremo la decisión sobre las candidaturas de Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí a las elecciones europeas. Entienden que debe pronunciarse el Alto Tribunal –que ya ha anunciado que se reunirá este domingo a las 12.00 horas para tomar una decisión– porque el recurso plantea cuestiones que afectan “tanto a la inelegibilidad de los candidatos como a la proclamación de las candidaturas”.

En los tres juzgados habían recaído recursos idénticos de los tres políticos catalanes contra su exclusión de la candidatura europea de JxCat. La Junta Electoral Central consideraba −tras un recurso de PP y Ciudadanos contra la designación− que no son elegibles pues, al haber sido declarados en rebeldía en el juicio del procés, no pueden figurar en el censo electoral. Según la resolución dictada este sábado, los tres tribunales estiman que el Supremo tiene que establecer un criterio jurídico que lo resuelva y evitar así “posibles resoluciones contradictorias”.

Unos minutos antes de conocerse esta decisión, Puigdemont, Comín y Ponsatí han comparecido en rueda de prensa desde Bruselas junto a sus tres sustitutos provisionales para el 26M, el abogado Gonzalo Boye, el exalcalde de Barcelona Xavier Trias y la exmilitante del PSOE Beatriz Talegón. Puigdemont ha afirmado que, aunque finalmente no pueda ser cabeza de lista, su intención es continuar con la campaña: “Vaya quien vaya de cabeza de lista, haremos campaña. Nos pueden apartar de la lista, pero no nos apartarán de la campaña, ni nos apartarán de la política”. También ha asegurado que agotarán todas las vías judiciales, aunque en ese momento todavía no se conocía esta resolución.

El expresident de la Generalitat, que ha agradecido la “generosidad” de los tres sustitutos, ha dicho que la decisión inicial de la Junta Electoral Central ya ha generado un “impacto” en su campaña que les sitúa en un “punto de partida” de inferioridad con respecto al resto: “Intentaremos compensar este perjuicio de la ofensiva de la Junta Electoral con un sobreesfuerzo para competir en igualdad de condiciones”. En la misma rueda de prensa, Boye ha explicado que si la Justicia no les da la razón prevén presentar un recurso ante el Constitucional.

La Fiscalía apoya en un informe que sean candidatos

En un informe enviado este viernes, la Fiscalía había argumentado que la ley no contempla “en modo alguno la restricción o supresión del derecho de sufragio de los procesados” y que, en aras del respeto a la presunción de inocencia, no se puede comparar la situación de un procesado con la de un condenado por sentencia judicial

Así lo argumentaron también cuatro miembros de la Junta Electoral que emitieron un voto particular contra la decisión adoptada por sus compañeros. “La situación de rebeldía penal no está incluida como causa de inelegibilidad”, escribieron en la resolución que tomó la JEC el pasado 29 de abril. Sin embargo, la mayoría argumentó que los tres candidatos no reunían la condición de electores y les excluyó de la lista.

Puigdemont, Comín y Ponsatí ocupaban los tres primeros puestos de la lista. Los dos primeros residen en Bélgica desde que abandonaron España el mismo día que la Fiscalía presentó la querella por el 1-O. Ponsatí se marchó en un primer momento a Bruselas pero después se instaló en Escocia. Los tres están reclamados por el Tribunal Supremo para ser juzgados en el caso del procés y pesa sobre ellos una orden de detención en España.

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