El líder de la LN propone a otro candidato a presidir el Senado tras el veto del M5S

El líder de la Liga Norte y de la coalición de derechas, Matteo Salvini, propuso hoy votar a la candidata de Forza Italia Anna Maria Bernini para presidir el Senado, para contar con el apoyo del Movimiento Cinco Estrellas (M5S), que había impuesto un veto al anterior candidato de esta alianza.

El Parlamento italiano está celebrando hoy su primera sesión de la XVIII legislatura y el primer paso es la elección de los presidentes de la Cámara de los Diputados y del Senado.

Ya se han celebrado dos votaciones en ambas cámaras y en las dos ha salido mayoría de papeletas en blanco, pues los partidos no han logrado alcanzar un acuerdo para elegir a los presidentes.

En los últimos días, los medios italianos apuntaban a que podría haber acuerdo pues la coalición de derechas, formada por Forza Italia, Liga Norte y Hermanos de Italia, estaba dispuesta a ceder la presidencia de la Cámara de los Diputados al M5S, algo que esta formación quiere, si la alianza conservadora presidía el Senado.

Sin embargo, Forza Italia proponía para el Senado a Paolo Romani, un candidato al que el M5S no está dispuesto a apoyar porque fue condenado por malversación pública, aunque la sentencia ha sido recurrida.

“La LN ha votado a Anna Maria Bernini para salir del pantano, estamos teniendo un gesto de responsabilidad, queremos que el Parlamento empiece a trabajar lo antes posible”, ha dicho Salvini a los medios.

“Hemos elegido a otro candidato, también de Forza Italia, para ver si el M5S tiene veto solo sobre un nombre o si lo que ocurre es que no quieren que comience la legislatura. A ver si el resto de los partidos dan un paso atrás como lo hemos hecho los demás”, añadió.

El viraje de la LN no ha gustado a Forza Italia y Renato Schifani, miembro de este grupo político, ha declarado a los medios que “actualmente hay un candidato (a presidir el Senado por la coalición de derechas) que es de Forza Italia y que es Paolo Romani”.

Sin embargo, ha añadido que tendrá que ser el líder del partido, Silvio Berlusconi, quien valore un cambio de estrategia.

La normativa prevé que para la elección del presidente de la Cámara baja el voto sea secreto y sea necesaria una mayoría de dos tercios en las tres primeras votaciones, mientras que en la cuarta bastará con la mayoría absoluta.

En el Senado, en las tres primeras votaciones es necesario que uno de los candidatos obtenga la mayoría absoluta, mientras que en la cuarta se elegirá entre los dos candidatos más votados y saldrá elegido quien consiga una mayoría simple.