La artista Lita Cabellut regresa a España con “Trilogía de la duda”

Autodefiniéndose como “retratista de almas”, regresa a Barcelona y expone por primera vez en España la artista de origen gitano Lita Cabellut, establecida desde hace años en Holanda, que ahora recala en la Fundación Vila Casas con “Trilogía de la duda”, articulada en torno a la condición humana.

Una treintena de obras ocuparán entre hoy y el próximo día 21 de julio dos salas del Espai Volart 2, con trabajos realizados entre los años 2012 y 2013, creados expresamente para esta exposición, con el hombre “como núcleo de la duda”.

En un encuentro con periodistas, la artista que nació en la capital catalana en 1961, ha reconocido hoy que se trata de una “exposición dura, de entrada, aunque después va volviéndose dócil, como ocurre muchas veces en la vida, con sensaciones de terciopelo”.

Criada en el ambiente de la calle y viviendo como huérfana en el Raval barcelonés, entre carteristas y prostitutas, Lita Cabellut fue adoptada a los doce años y un año más tarde su vida dio un vuelco cuando acudió con su nueva familia al Museo del Prado y descubrió la obra de Goya, Velázquez, Ribera o Rembrandt.

“Yo me había criado -ha señalado- en un ambiente bruto, oscuro, húmedo y, cuando tuve la oportunidad de ver la belleza en el museo, me dije que eso era lo que quería hacer a partir de ese momento, aprendiendo antes a pintar que a leer y contar, algo que todavía hoy se me da muy mal”.

A los 19 años emigró a Holanda, donde estudió en la Academia Rietveld de Amsterdam hasta el año 1984, cuando decidió con una bicicleta recorrer parte del continente africano hasta que enfermó de malaria y decidió volver a La Haya, donde desde entonces tiene su casa.

Aunque a los 16 años exhibió algunas de sus obras en el Ayuntamiento de El Masnou, considera que la exposición que ahora se inaugura en Volart 2 es la primera de estas características que hace en España, después de pasar con sus retratos de Frida Kahlo o Charles Chaplin por la Opera Gallery de Londres o con otros de Coco Chanel por París o sobre Camarón de la Isla por Berlín.

En su opinión, esta “Trilogía de la duda”, apoyada en cinco trípticos sobre el reto, la ilusión, la verdad o la muerte, es “muy especial y muy emocional, porque es volver a casa, a mis cincuenta años, superando muchas cosas de mi vida y de haber logrado ser mejor persona que cuando empecé, encontrando a gente de muy noble corazón”, en referencia a los miembros de la Fundación Vila Casas.

Aunque no le gusta ahondar en sus circunstancias vitales, Lita Cabellut no ha dudado en aseverar que se siente “muy gitana”. “También soy una emigrante, muchas cosas juntas. Si me lo permitieran, tendría un estudio con ruedas para ir por el mundo”, ha apostillado.

Preguntada sobre si tiene previsto volver a vivir en su ciudad natal, la pintora ha exclamado que le encanta Barcelona y que no le resulta extraño imaginarse “haciendo de viejecita aquí”.