López Cobos: “Se te quitan las ganas de hacer proyectos en España”

El director de orquesta Jesús López Cobos lamenta que en su carrera encaje perfectamente el dicho de que “nadie es profeta en su tierra”. Tras su reciente polémica con los responsables del Teatro Real, el músico zamorano afirma tajante que se le quitan las ganas de hacer proyectos en España.

“En cierto modo, te da un poco de pena porque, mirando atrás en mi vida, resulta que de las dos veces que yo trabajé en España de forma estable, las dos veces terminé de mala manera. Y sólo me ha pasado ahí”, recuerda el director en una entrevista con Efe.

López Cobos, que decidió no renovar en 2010 su cargo de director musical del Teatro Real, se refiere así a la polémica generada por una entrevista con un diario austríaco en la que Gerald Mortier, actual responsable artístico, afirmaba que lo habían tenido que “echar” del Real y que apenas trabajó con la orquesta.

“Todo está en el juzgado. Así que yo no tengo más que decir. Lo hice en su momento, cuando mandé el burofax (pidiendo a la dirección del Real una rectificación). Como la contestación no fue la que esperaba, pues entonces yo lo puse en manos de los abogados y ellos han presentado la demanda”, resume el director.

El pasado día 22, el director presentó una demanda contra el Teatro Real, el propio Mortier y también el diario austríaco Kurier, al entender que se ha lesionado su derecho al honor.

Mortier, por su parte, ha declarado que el rotativo vienés malinterpretó sus palabras.

“No me ha pasado en Berlín, donde terminé y terminé siendo miembro de honor del Teatro de la Ópera, y continúo trabajando. En Cincinnati me nombraron director honorario de la orquesta. Es una pura casualidad que, justo en mi país, las dos veces que trabajé, tuve que salir”, recuerda López Cobos

“Cuando me marché de la Orquesta Nacional (en 1998), yo no entré en España en diez años. No entré, siquiera, ni de vacaciones, porque me fui muy, muy dolido por todo lo que pasó”, rememora el Premio Príncipe de Asturias de las Artes.

“Luego me dejé convencer, con toda la ilusión, por muchas razones, de volver (en 2003) al Teatro Real, aunque mi tendencia entonces, cuando me preguntaron, era que no quería volver. Y ahora me ha vuelto a pasar otra vez”, lamenta López Cobos.

Por eso, afirma que estas experiencias “le quitan las ganas” de hacer proyectos en España.

El prestigioso director, de 73 años, se encuentra en Viena ensayando para la representación del Rigoletto de Verdi el próximo lunes, una obra que nunca ha interpretado en la Ópera de la capital austríaca.

López Cobos, buen conocedor de esta ciudad, asegura que reconforta ver que aún hay plazas fuertes como Viena que se “resisten más a que se note una crisis económica, porque la cultura, en general, y la música, en particular, tiene un papel importante, también sociológicamente hablando”.

“Siempre tuve envidia de los países germanos cuando estaba en los países latinos. Las posibilidades que hay aquí, culturales y musicales, son mucho mayores que en nuestros países. Por todo, por tradición y por público. Existe un público para ello”, opina el maestro.

Respecto al Teatro Real y el debate sobre si su actual programa es demasiado moderno para el público, López Cobos opina que es posible que se dé esa situación y comenta que “se ha visto que en algunos espectáculos, pues el público no responde”.

Con todo, quien fuera también director musical de la Orquesta de Cámara de Lausanne, matiza que durante más de 40 años apenas se representaron óperas en Madrid.

En los países con una tradición mucha más larga “quizás están más predispuesto a recibir distintas visiones de la ópera, sobre todo desde el punto de vista escénico”, apostilla.

Antonio Sánchez Solís