Luena avisa de que no puede haber “artimañas” para quitar la voz a la militancia del PSOE

El secretario de Organización del PSOE, César Luena, ha avisado este miércoles de que “no puede haber ningún tipo de artimañas para quitar la voz a los militantes” y se ha mostrado convencido de que el Comité Federal del partido aprobará el próximo sábado la propuesta de celebrar un congreso en diciembre.

Luena se ha expresado así ante las informaciones que apuntan a que los críticos del secretario general, Pedro Sánchez, buscan la dimisión de la mitad más uno de los miembros de la Ejecutiva para así forzar la formación de una gestora y que no se celebre el Comité Federal.

A su juicio, es el momento de “debatir todos” en un congreso y “cualquier otra cosa que se intente hacer por la puerta de atrás tendrá un recorrido muy corto y además negativo para el partido”.

“NO SÉ SI SON CRÍTICOS, PERO NO SON MATEMÁTICOS”

En una entrevista en la Cope, recogida por Europa Press, el 'número dos' del PSOE ha sugerido además que los críticos no lograrán los apoyos suficientes de miembros de la Ejecutiva: “De los compañeros e incluso amigos que ahora se dicen críticos, tengo dudas de si son críticos o ejercen de críticos, pero me da que lo que no son es matemáticos”.

Así, está convencido de que el Comité Federal estudiará el sábado la propuesta de Sánchez de celebrar primarias el 23 de octubre, si alguien quiere disputarle el liderazgo, y un congreso en diciembre, incluso de que la aprobará. “Que nadie tenga ninguna duda”, ha remarcado. Los contrarios a la celebración de este congreso podrían intentar 'tumbarlo' sometiéndolo a la votación del Comité.

DÍAZ “LLEVA TIEMPO ORGANIZÁNDOLO”, PERO NO SABE SI ENCABEZARÁ

Sobre si la presidenta andaluza, Susana Díaz, encabezará a los llamados críticos contra Sánchez, ha afirmado que, según lo que él sabe, “lleva organizándolo un tiempo”, pero no sabe si finalmente “lo va a encabezar ella”.

Luena ha admitido que las opciones que manejan los críticos pueden ser conformes con las normas del PSOE, que él tiene que hacer cumplir, pero políticamente cree que no puede haber “ningún intento de anular la voz de los militantes”.

Además, cree que por encima de todo está “el debate profundo, político” que Sánchez quiere poner sobre la mesa, si el partido debe o no abstenerse para permitir un gobierno del PP. Ese debate, ha admitido, ya estaba y “era absurdo e incluso irresponsable no hacerlo”, así que lo mejor es que se debata en un congreso para que luego todo el partido pueda hablar con una sola voz y con un líder que la defienda.

A su modo de ver, los “compañeros” que tienen “legitimas posiciones políticas distintas” a las de Sánchez deben presentarlas a los afiliados en un congreso. Luena está convencido de que hay tiempo “incluso para cambiar de posición” antes de que haya que convocar elecciones, o para que, si hay terceras elecciones, el PSOE se presente a unas nuevas elecciones con un “proyecto claro y un líder que después de debatir y después de votar sea la única voz del partido, sea quien sea”.

TIENEN FÁCIL RECOGER 9.000 AVALES

Es más, les ha dicho que “lo tiene fácil”, porque no es difícil recoger 9.000 avales para quien tiene “capacidad y liderazgo”, y se presenten contra él en las primarias.

Luena ha reconocido que la dirección del PSOE ha cambiado de posición en la medida en que inicialmente no quería celebrar congreso hasta que hubiese gobierno en España, pero ahora cree que si no se afronta ese debate pendiente el PSOE no estará siendo “ni honrado ni útil” para España, y está convencido de que así lo entenderá el Comité Federal.

En la misma línea, no cree que el Grupo Parlamentario Socialista esté en contra de la celebración del congreso y ha remarcado que en la opinión de ayer la dirección del grupo seguramente optó, “acertadamente”, por escuchar las intervenciones individuales de quienes estaban en contra.

El dirigente ha remarcado que España tiene por delante grandes desafíos y el PSOE quiere “afrontarlos con fortaleza”. Para eso, ha dicho, plantea el debate y “a la vez”, no renuncia a formar un gobierno alternativo que está convencido de que quieren buena parte de votantes del PSOE, de Unidos Podemos y de Ciudadanos.