Margallo planea viajar a Irán próximamente tras el levantamiento de sanciones

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, dijo hoy que planea viajar a Irán tras el levantamiento de sanciones económicas del mismo modo que prevén hacerlo sus principales homólogos de la UE.

“Se trata de establecer contactos y favorecer la continuación de un proceso que debe terminar en acuerdo”, dijo en una rueda de prensa al término de un Consejo de Ministros de Exteriores de la UE Margallo, que añadió que “hay que estar presentes en Irán una vez que han cambiado las circunstancias”.

Margallo recordó que tanto el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, como él mismo han mantenido reuniones bilaterales con los principales dirigentes y altos diplomáticos de ese país en los últimos meses.

El ministro de Exteriores subrayó que las sanciones a Irán significaron un “sacrificio” para España, que antes de la medida europea contra Irán importaba un notable volumen de crudo del país islámico.

“Anteriormente, importábamos un 14% de nuestras necesidades energéticas”, apuntó.

A la pregunta de si los contactos podrían tener como objetivo plantear la opción de retomar la importación de crudo de Irán, Margallo se limitó a bromear con un viejo refrán español: “a por atún y a ver al duque”.

Margallo recordó que el objetivo de las sanciones a Teherán “no era cambiar de régimen sino conseguir que se sentaran en la mesa de negociaciones y que congelasen su programa nuclear de uso militar”.

Tras recibir del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) la constatación de que ese país ha suspendido la producción de uranio enriquecido al 20 %, una de las condiciones del acuerdo alcanzado entre las partes en noviembre en Ginebra, “ahora le toca a la UE cumplir con su parte del trato”, dijo el ministro.

“En el proceso las dos partes van verificando que se avanza y que cada uno cumple religiosamente las obligaciones asumidas”, apuntó.

La Unión aprobó hoy suspender algunas de las sanciones económicas a Irán tal y como prevé el plan de acción alcanzado entre las potencias del “G5+1” y Teherán sobre el polémico programa nuclear iraní, con vistas a allanar el camino para lograr un pacto definitivo en seis meses.

“Hoy hemos decidido comenzar la implementación de la fase de seis meses de medidas iniciales de construcción de confianza con el objetivo de hacer frente a las preocupaciones internacionales sobre las actividades nucleares de Irán”, indicó en un comunicado la jefa de la diplomacia de la UE, Catherine Ashton, al término de la reunión.