Margallo avisa de sanciones si no se logra un gobierno de unidad en Libia en plazo “razonable”

Margallo ha calificado de “buena noticia” que las distintas facciones libias se hayan reunido en Rabat para discutir cuestiones de seguridad y la creación de un gobierno de unidad nacional que se convierta en interlocutor de la comunidad internacional “para diseñar el futuro de Libia”.

En declaraciones a la prensa a su llegada a la reunión informal de dos días con sus homólogos de la UE en Riga en la que discutirán, entre otros, Libia, ha avisado de que si en un tiempo “razonable” no se ha creado “habría que estudiar un plan B, que consistiría en establecer sanciones, imponer sanciones a los que torpedeen, dificulten el proceso de paz”.

Los Gobiernos de la Unión Europea han aprobado de hecho este viernes modificar los criterios de las sanciones “para designar a personas y asociaciones a fin de implementar la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU 2174” algo que “allana el camino para imponer la congelación de activos y restricciones de viaje a personas y entidades implicadas en actos que amenazan la paz, estabilidad o seguridad de Libia u obstruyan que se complete con éxito su transición política”, han explicado a Europa Press fuentes europeas.

Margallo ha recordado que a la cita en Rabat, a la que acudieron cuatro representantes de las facciones de Trípoli y Tobruk, le seguirán otras “en Argel, Bruselas y probablemente Egipto” y ha confiado en que Madrid también albergue una conferencia “a la que exista ya un nuevo Gobierno libio y asistan los países que estuvieron presentes” en la anterior de Madrid y en la que acogió Nueva York.

De hecho, el jefe de la diplomacia española ha confiado en que Libia cuente con un Gobierno de unidad nacional para poder asistir a la reunión ministerial de Exteriores del 13 de abril que acogerá Barcelona de los países de la UE y de los países de la ribera sur del Mediterráneo (Argelia, Marruecos, Túnez, Israel, Palestina, Jordania, Líbano y Egipto) para hablar de la cooperación y los nuevos desafíos en la zona, ante el avance del terrorismo.

Margallo ha precisado que “todos” los países de la ribera sur del Mediterráneo han sido invitados a la ciudad condal “salvo” Libia porque el país no tiene interlocutor ante la comunidad internacional aunque ha confiado en que “haya para esas fechas” lo haya y Siria, cuya ausencia ha justificado “porque las relaciones con el Gobierno de Bashar al Assad son manifiestamente mejorables”.

La UE ha sancionado ya a un total de 218 personas vinculadas al régimen, incluido al propio Assad y sus familiares, y 69 empresas y asociaciones por la represión contra la población civil en Siria o apoyar al régimen y ha aprobado, entre otros, un embargo de armas al país y sanciones económicas y energéticas.

La reunión en Barcelona tendrá lugar “antes de la otra cumbre” que acogerá Riga sobre la Asociación Oriental, que reúne a seis países del Este de Europa, ha precisado Margallo. La cita en Barcelona será a nivel de ministros de Exteriores, han precisado fuentes europeas.