Miles de sancristobaleños festejan la supuesta victoria de la oposición

Miles de sancristobaleños se lanzaron hoy a las calles para celebrar la supuesta victoria electoral del Equipo de Unidad y la derrota, no confirmada por el supervisor electoral, del Gobierno que lleva ejerciendo el poder en las islas caribeñas desde hace veinte años.

Pese a que aún no se han anunciado oficialmente los resultados de las elecciones celebradas el país más pequeño de América, gran parte de la población de San Cristóbal y Nieves da por hecha la victoria de la coalición de partidos de la oposición.

Ello supondría la derrota de Denzil Douglas, que, de haber ganado en estos comicios, se hubiera convertido en el primer ministro de la Comunidad del Caribe (Caricom) con más tiempo en el poder de forma ininterrumpida.

Los seguidores del Equipo de Unidad se reunieron hoy alrededor de la sede del Gobierno en la capital, Basseterre, para reclamar a gritos a Douglas, de 62 años, que admita su derrota.

“Esto no es un espectáculo de calypso” o “Vete Denzil” eran algunos de los mensajes que se podían leer en las pancartas que portaban los ciudadanos que acudieron a esta celebración espontánea, vigilada por policías notoriamente armados.

Según datos policiales, un hombre murió hoy a tiros en el centro de Basseterre, pero no está claro que este incidente tenga relación alguna con el proceso electoral.

El Departamento Electoral emitió hoy un escueto comunicado indicando que el resultado final de las elecciones del lunes aún no se puede difundir porque el recuento “está siendo refutado”.

En cualquier caso, el vicepresidente del gobernante Partido Laborista de San Cristóbal y Nieves (SKNLP), Nigel McCarthy, reconoció a la radio estatal ZIZ que, según “las tendencias de voto, el partido de oposición pueden haber ganado las elecciones”.

El SKNLP había pedido a la ciudadanía que le apoyara de nuevo para poder continuar con el desarrollo socioeconómico de este país, de tan sólo 261 kilómetros cuadrados y menos de 40.000 habitantes.

Pero el Equipo de Unidad defendía que ya era hora del cambio para lograr una “prosperidad para todos” y acusaba a la Administración saliente de nepotismo, corrupción y mala gestión económica.

Ambos partidos se disputan once escaños de Asamblea Nacional. Este cuerpo tiene quince asientos, pero cuatro de ellos son designados a dedo por el gobernador general (elegido por la reina Isabel II de Inglaterra) y el fiscal general.