Mocidade Granate se definen como no violentos y asociados a la izquierda y el nacionalismo

El menor de edad que esta tarde le ha asestado un puñetazo al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, nació el 16 de marzo de 1998 (17 años) y no cuenta con antecedentes penales, según fuentes de la investigación. Pertenece a un grupo de seguidores radicales del Pontevedra Club de Fútbol llamado Mocidade Granate (por el color de la camiseta del equipo).

“Somos seguidores del equipo, aunque a la gran mayoría del grupo nos atrae el movimiento hooligan”, decían dos de sus miembros en una entrevista concedida este mismo mes a la web 'Hai que Roelo' (expresión con la que se conoce al Pontevedra).

En esta entrevista recogida por Europa Press se les preguntaba acerca de sus ideas políticas y su relación con la violencia, ante lo que respondían que en ese tema prefieren “no entrar”. “Somos seguidores y luego cada uno que nos llame como quiera. Sí que es cierto que a casi todos nos atrae ese movimiento (hooligan). El problema es que ese movimiento va relacionado con la violencia y nosotros de violentos, de momento, no tenemos nada”, aclaraban.

En relación a sus ideas políticas añaden: “hay gente que prefiere reservarse, aunque es cierto que el grupo sí está asociado a ciertos valores políticos como la izquierda y el nacionalismo”. Tras la agresión del joven A.V.F, miembro de su grupo, Mocidade Granate ha difundido un tuit en el que se informaba de que el colectivo se desmarca de la agresión al presidente del Gobierno.

Mocidade Granate nació el 30 de noviembre de 2014 sustituyendo a Furya Granate, el grupo que anteriormente se encargaba de la animación en el estadio de Pasarón donde juega sus partido de casa el Pontevedra. En sus inicios, Mocidade Granate apenas eran 20 personas, pero actualmente dicen contar con 76 personas que pagan la cuota como miembros del grupo.

Admiten que la mayoría de ellos son menores de edad y que no están constituidos oficialmente como peña oficial del club por lo que no cuentan con ayuda económica. “Realmente es algo que tampoco nos interesa mucho”, explicaba uno de ellos.

Aseguran estar enfrentados actualmente con la directiva del club y se desvinculan de incidentes registrados la temporada pasada en la zona en la que se ubican en el estadio. El Pontevedra C.F juega actualmente en la Segunda División, en la que ocupa la quinta posición.