Morenés visita a las tropas en Mali y anuncia la ampliación de la misión

El ministro español de Defensa, Pedro Morenés, anunció hoy que España ampliará su aportación a la misión europea en Mali, con el envío de al menos 30 militares más, durante su primera visita a las tropas españolas en ese país africano.

Morenés -acompañado por el jefe de Estado Mayor español de la Defensa (JEMAD), almirante general Fernando García Sánchez, y el embajador en Mali, José María Matres- visitó el campamento militar de Koulikoro, donde hay 58 militares integrados en la misión europea EUTM de formación del ejército maliense, y el destacamento aéreo en Dakar, con 54 efectivos en apoyo a la intervención francesa en Mali.

En Koulikoro, a unos 60 kilómetros de Bamako, pudo comprobar los trabajos de los quince instructores españoles que adiestran a cerca de 700 soldados malienses, en unas condiciones extremas, bajo el sol y con unos 45 grados de temperatura.

Se trata de la primera visita de Morenés al contingente español, que se desplegó el pasado 13 de abril.

Con este viaje, Morenés ha puesto de manifiesto el compromiso de España con Mali y la lucha contra el terrorismo de Al Qaeda en el Sahel.

Esta visita se produce una semana antes de que la UE decida una nueva aportación a la misión, ya que sus responsables militares se reúnen el 15 de mayo.

En este sentido, Morenés declaró a los periodistas que cubren su viaje que “la misión se está cumpliendo y España va a hacer más”

Indicó que acudirá al Parlamento a solicitar la correspondiente autorización parlamentaria para ampliar la misión, con el envío de una sección (unos 30 efectivos) para labores de protección de la fuerza.

En la “academia militar” de Koulikoro, según la definió el jefe del contingente español, teniente coronel Antonio Varo, también viven los 35 militares que hacen la labor de protección de la fuerza de la misión europea.

A los instructores españoles no les preocupa mucho el asfixiante calor y manifiestan que por ahora su experiencia es muy positiva.

Tampoco las condiciones del campamento importan mucho a los 15 efectivos del Mando de Operaciones Especiales, que se encargan de la instrucción.

Treinta y cinco legionarios tienen como función en Koulikoró garantizar la seguridad de las instalaciones y del propio adiestramiento.

La base de Koulikoro se encuentra situada junto al río Níger y en ella conviven los militares españoles con franceses, británicos, alemanes, checos, chipriotas o griegos, efectivos procedentes de un total de 22 países europeos.

Allí los españoles forman a los futuros soldados malienses en operaciones especiales, con el fin de que se preparen para desplegarse al norte del país, zona recuperada de las manos de los grupos yihadistas.

En Koulikoro la jornada empieza a las 05.30 horas, con el toque de “diana”, y tras desayunar, a las 08.00, comienza la instrucción hasta las 19.00 horas.

De momento enseñan técnicas de comando, pero más adelante darán clases de manejo de morteros y artillería ligera, según los responsables militares españoles.

El próximo mes de julio se licencia el primer batallón, compuesto por casi 700 malienses.

La UE tiene previsto, en los quince meses de misión fijada, formar a cuatro batallones.

Para su trabajo, los militares españoles cuentan con nueve vehículos LMV Lince, ya usados en Afganistán y Líbano.

La misión EUTM-Mali cuenta con un presupuesto europeo de 12,3 millones de euros, está compuesta de unos 550 efectivos, de los que alrededor de 200 son formadores, 150 personal logístico y médico, otros 150 fuerzas de protección y medio centenar mandos.

España es el tercer país que más efectivos ha desplazado al país africano después de Francia, que contribuye con 207, y Alemania con unos 70.

A última hora de la tarde, el ministro español se desplazó, a bordo de un “Hércules”, de Bamako a Dakar.

En Dakar compartió unas horas con los 54 militares del Ejército de Aire que integran el destacamento “Marfil”.

Desde que se desplegó en la capital senegalesa, este destacamento ha realizado 110 salidas y ha transportado más de 800 personas y unas 24 toneladas de carga.

Asimismo, ha cumplido dos misiones de reabastecimiento en vuelo a cazas “Mirage” franceses.