Los Mossos denuncian al Defensor la politización por el Govern de sus funciones

El sindicato CSIF de los Mossos d'Esquadra ha denunciado ante el Defensor del Pueblo la politización por parte del Gobierno de la Generalitat de sus funciones y le ha trasladado su inquietud por la falta de previsión en el dispositivo policial del próximo viernes ante la celebración en Barcelona del Consejo de Ministros.

Representantes de este sindicato han acudido a la sede del Defensor del Pueblo, en Madrid, para presentar un escrito de denuncia por el “anormal funcionamiento” de la Generalitat, su “falta de voluntad negociadora, sus peculiares interpretaciones del ordenamiento jurídico vigente y su discutible lealtad institucional”.

En declaraciones a los periodistas, el secretario general de CSIF en los Mossos, Juan José Torrente, ha censurado las “trabas” que pone el Govern para la negociación de las demandas de los agentes.

Torrente ha acusado al Gobierno de Quim Torra de querer politizar a los Mossos desde el 1 de octubre de 2017, cuando la Policía lo que debe hacer es “trabajar con absoluta neutralidad política”.

“Cuando alguien nos tira una piedra, nos duele igual, sea del color político que sea el que la tire”, ha dicho gráficamente el dirigente sindical antes de reiterar que ellos quieren trabajar como policías y con neutralidad política.

Otro de los asuntos que el CSIF ha trasladado al Defensor del Pueblo tiene que ver con la movilidad interadministrativa porque cada vez más agentes del cuerpo autonómico están pidiendo marcharse a las policías locales o a la Policía Nacional si se pone en marcha una “pasarela”.

Pero la Generalitat “está poniendo muchos impedimentos” para ese traspaso a las policías locales a pesar de que está regulado en el estatuto básico del empleado público.

El CSIF ha manifestado al Defensor su inquietud de cara al dispositivo de este viernes ya que, “a día de hoy, no tenemos directrices al respecto”, ha señalado Torrente, quien ha reprochado a la Consellería de Interior que aún no se haya convocado a los agentes que tienen que trabajar.

“No sabemos si es mala fe o falta de previsión de la Generalitat”, ha apostillado.

Y ha añadido: “No entendemos que por parte de la Generalitat no se haya trabajado con anticipación en un dispositivo que era previsible y se espera a la última semana. Para nosotros indica mala fe”.

Torrente ha dejado claro que lo que no quieren los mossos es verse “otra vez inmersos en la misma polémica del año pasado”. “Estamos muy cansados, el cuerpo está roto y es culpa del Gobierno de la Generalitat”, ha enfatizado el sindicalista.

Ha añadido que no tiene duda alguna de que el Govern intenta convertir a los Mossos en una policía política y ha expresado su malestar por la actitud del Govern tras las recientes cargas policiales en Girona y Terrasa, ya que cuestionó la “excelente labor” de los agente pero no la violencia de los manifestantes.

Además, ha recordado que hay un déficit de 1.800 agentes en la policía autonómica, por lo que es “difícil” garantizar la seguridad de Cataluña.