Musharraf dice que irá a Pakistán a afrontar el juicio por el asesinato de Bhuto

El exdictador militar Pervez Musharraf manifestó hoy que regresará a Pakistán cuando mejore su salud para hacer frente al juicio por el asesinato de la ex primera ministra Benazir Bhuto, después de que un tribunal le declarase prófugo por no presentarse al proceso y ordenase la confiscación de sus bienes.

“Desde luego que regresaré a Pakistán y haré frente al juicio, cuando me encuentre físicamente bien”, indicó el expresidente paquistaní en un comunicado publicado en su página de Facebook.

Tras nueve años de procesos judiciales, ocho jueces y 300 vistas, un tribunal antiterrorista paquistaní absolvió el jueves a los cinco acusados de conspirar para asesinar a Bhuto, en una sentencia que condenó a 17 años a dos expolicías por negligencia y declaró prófugo a Musharraf.

El exgeneral y expresidente salió del país en marzo de 2016 alegando motivos médicos con la promesa de regresar “en semanas o meses” y hacer frente a varias causas judiciales, entre ellas una por alta traición, pero no la cumplió.

En su comunicado, Musharraf afirmó que no hay pruebas contra él, excepto el testimonio del periodista estadounidense Mark Siegel, a quien Bhuto le dijo que el entonces presidente del país la había amenazado con “graves” consecuencias si regresaba desde el exilio.

“Me han incriminado en el caso de asesinato de Benazir Bhuto. Todo el caso contra mi es materialmente falso, ficticio, inventado y el resultado de intrigas políticas”, aseguró el general que gobernó Pakistán entre 1999 y 2008 tras dar un golpe de Estado incruento.

Además, señaló que sus abogados están estudiando la orden de confiscación de sus bienes y que presentará una apelación.

En abril de 2010 una comisión de la ONU responsabilizó a Musharraf de la muerte de Bhuto por no haberle proporcionado una seguridad adecuada y acusó a las autoridades de hacer fracasar la investigación del caso de manera “deliberada”.

El exjefe del Ejercito paquistaní se enfrenta a otro caso judicial por traición por suspender el orden constitucional y decretar la detención de decenas de jueces en 2007, durante un pulso con el Poder Judicial, un delito que acarrea la pena de muerte.

Tras jugar al gato y el ratón durante meses con el tribunal que lo juzgaba por traición, la corte le dio permiso para viajar el extranjero por motivos de salud y Musharraf prometió volver en “semanas o meses”, pero sigue fuera del país.

Dos veces primera ministra, Bhuto murió el 27 de diciembre de 2007 junto a otras veinticuatro personas en un atentado perpetrado por un terrorista suicida de 15 años que hizo estallar una carga explosiva en un mitin en la ciudad de Rawalpindi, poco después de que la líder del Partido Popular de Pakistán (PPP) retornara al país tras casi nueve años de exilio.