El enviado de la ONU para Yemen seguirá buscando una salida política en Al Hudeida

El enviado de la ONU para el Yemen, Martin Griffiths, aseguró hoy que continuará sus consultas con todas las partes para evitar una mayor escalada militar en Al Hudeida, urbe estratégica del mar Rojo que las tropas gubernamentales se disponen a asaltar para arrebatar su control a los rebeldes hutíes.

En un comunicado, emitido desde la capital jordana, Ammán, el representante dijo que teme que esa escalada tenga “severas consecuencias políticas y humanitarias”, tal y como viene advirtiendo la ONU en los últimos días.

“Mi prioridad es evitar una confrontación militar en Al Hudeida y volver rápidamente a las negociaciones políticas”, aseveró.

Griffiths señaló que confía en la posibilidad de llegar a un acuerdo, después de los encuentros constructivos mantenidos con el liderazgo del movimiento hutí en los pasados días en Saná, de donde se marchó ayer.

Asimismo, el enviado dijo que tiene previsto reunirse con el presidente yemení reconocido internacionalmente, Abdo Rabu Mansur Hadi, exiliado en Arabia Saudí, y con su Gobierno.

Las fuerzas leales a Hadi, con el apoyo de la coalición árabe capitaneada por Riad, se disponen a lanzar una gran ofensiva sobre Al Hudeida, donde habitan 600.000 personas y que está controlada por los rebeldes hutíes desde 2014.

La ciudad y su puerto son de importancia estratégica porque a través de este punto llega al Yemen el 70 % de las importaciones de suministros básicos y alimentos de los que depende el país.

Las organizaciones humanitarias han advertido de una posible crisis si la violencia alcanza la urbe, debido a la densidad de su población, mientras que los combates se han concentrado hasta el momento al sur de Al Hudeida y en torno a su aeropuerto.