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Odón Elorza pide anular el concurso de los restaurantes del Congreso para evitar “mayor desprestigio de los diputados”
La convocatoria de ese concurso y las condiciones correspondientes fueron aprobadas hace nueve días en la Mesa del Congreso, con el aval de los representantes del PSOE, y los pliegos se publicaron el pasado viernes, sin que cambien respeto a las condiciones que rigen actualmente en la Cámara.
En su misiva, fechada el 29 de mayo a la que ha tenido acceso Europa Press, Elorza explica que tuvo conocimiento “por la prensa” de esa decisión del órgano de gobierno de la Cámara y considera “injustificable e incorrecto” que en la parte referida a los precios de los diferentes productos se establezca que éstos, “como hasta ahora”, se mantendrán “por debajo de lo habitual en cualquier establecimiento equiparable”.
NADA DE ALCOHOL EN EL BAR DEL HEMICICLO
Elorza, que interpreta que se fijan unos precios específicos para sus señorías, sostiene que algunos, incluyendo el menú del día en restaurante a 13,40 euros, “pueden considerarse como reducidos o subvencionados”.
Y añade: “Nos encontramos con otras ofertas que, si bien es cierto que no son casi demandadas, tienen precios que llaman la atención”, argumenta respecto al precio de los combinados, a la vez que aprovecha para pedir que no se sirvan bebidas de alta gradación en el bar del hemiciclo, que sólo funciona para los diputados y en las horas de Pleno.
El diputado recuerda que hace cinco meses ya mostró su preocupación por estos temas ante un miembro de la Mesa y ante la directora de presupuestos del Congreso, pero que no se han seguido sus recomendaciones. Según revela, planteó que se aprovechara el nuevo concurso para “corregir todo aquello relacionado con los precios que pudiera entenderse por la ciudadanía como algo inmoral”.
Por eso ahora ha optado por dirigirse directamente a Posada para reclamarle que se suba el precio de “los servicios más habituales consumidos por los diputados”, entre los que cita “comidas, desayunos, bebidas y, de mantenerse, las copas”.
Elorza apela a “razones morales” para pedir la anulación del concurso y evitar así que la ciudadanía “pueda pensar” que sus señorías gozan “de privilegios al disfrutar de unos precios en los servicios de cafetería y restauración difíciles de encontrar en establecimientos corrientes abiertos al público en general”, lo que contribuiría a “dar pié a un mayor desprestigio de los miembros de la Cámara”.
