Once heridos en enfrentamientos entre policía y manifestantes en Portugal

Una manifestación convocada por los “indignados” lusos para protestar contra el Gobierno y sus últimas medidas de austeridad acabó esta madrugada con enfrentamientos con la policía, en los que 11 personas resultaron heridas leves, informó hoy la policía.

Según las fuentes, diez de los heridos eran agentes de seguridad y uno de los manifestantes fue llevado al hospital por un golpe en la cabeza.

Este último se encuentra detenido junto con otro participante en la protesta, acusados ambos de resistencia a la autoridad y coacción.

El enfrentamiento se produjo ya de madrugada frente a la Asamblea de la República, en Lisboa, donde desde las seis de la tarde de ayer se reunían en torno a un millar de personas -un número inferior al habitual en las protestas de las últimas semanas- para participar en una iniciativa llamada “rodear el Parlamento”.

La concentración fue convocada por los movimientos ciudadanos “15 de Octubre” y “Sin Empleo”, representantes de los “indignados” lusos, en un acto que buscaba emular la iniciativa llevada a cabo en Madrid (España) a finales de septiembre.

Los manifestantes lanzaron consignas dirigidas sobre todo contra el Ejecutivo conservador portugués, que ayer mismo presentó oficialmente y entregó al Parlamento su propuesta de Presupuestos para 2013.

El proyecto del Gobierno recoge cortes del gasto público y las prestaciones sociales, además de un significativo aumento de la presión fiscal a través de los impuestos sobre la renta, que se suma a la subida del IVA y otras tasas aplicada en los últimos meses en el marco de su severo programa de ajustes y reformas.

Los gritos que pedían la dimisión del Ejecutivo presidido por el primer ministro Pedro Passos Coelho se sucedieron a lo largo de toda la protesta, protagonizada fundamentalmente por gente joven.

Durante toda la noche se vivieron diferentes episodios de tensión entre un pequeño grupo de manifestantes -algunos de ellos enmascarados- y el amplio dispositivo policial, formado por más de un centenar de agentes y desplegado alrededor del Parlamento portugués.

Ya de madrugada, la policía lanzó una carga contra los manifestantes que rodeaban la residencia oficial del primer ministro -anexa al Parlamento- tras el lanzamiento de piedras y diferentes objetos sobre los agentes.

Como resultado, 11 personas resultaron heridas leves.

Los enfrentamientos registrados en esta protesta contrastan con el carácter pacífico de la mayoría de las múltiples manifestaciones convocadas en Portugal durante los dos últimos años, coincidiendo con la aplicación de fuertes medidas de austeridad.

El país se encuentra bajo la intervención de la troika -Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional- desde que solicitara el rescate financiero, en abril del pasado año.

Pese a que el Gobierno conservador luso ha aplicado a rajatabla el programa de ajustes acordado con los organismos internacionales, todavía afronta dificultades para reducir su déficit público hasta los niveles comprometidos, motivo por el que el Ejecutivo ha propuesto nuevos recortes.

La subida de impuestos y el endurecimiento de la austeridad ya ha sido rechazada por oposición y sindicatos y ha generado una fuerte contestación social, reflejada en una manifestación convocada también por los “indignados” el pasado 15 de septiembre que reunió a más de 600.000 personas, según la organización.