PNV censura la “actitud autoritaria y represiva” que emplea el presidente Maduro “contra la sociedad civil venezolana”

El Euskadi Buru Batzar (EBB) del PNV ha condenado este jueves los incidentes registrados en la Asamblea Nacional de Venezuela y ha mostrado su preocupación “por la cada vez más notoria incapacidad del Gobierno de Venezuela para prevenir y desactivar los sucesivos brotes de violencia protagonizados por gentes afectas al régimen”, así como por la “actitud autoritaria y represiva” con que el Ejecutivo del presidente, Nicolás Maduro, “se emplea contra la sociedad civil venezolana”.

En un comunicado, el EBB del PNV se ha manifestado, de esta forma, ante los “violentos acontecimientos” registrados este pasado miércoles, 5 de Julio, día de la independencia de Venezuela, con el asedio e invasión de la Asamblea Nacional y la agresión a varios parlamentarios de la oposición, a miembros del personal de la Cámara y a algunos periodistas.

Los jeltzales han expresado su “más enérgica condena ante esta ilegal y violenta irrupción en la sede de la soberanía popular, saldada con graves lesiones a algunos de sus representantes y trabajadores”.

A su entender, “esta agresión resulta especialmente grave porque constituye la expresión de un enorme desprecio a la democracia, ya que está dirigida contra los representantes de la voluntad popular”. “Es un ataque, en definitiva, contra la propia ciudadanía venezolana, representada en su Asamblea Nacional”, ha remarcado.

Asimismo, el PNV ha expresado su preocupación “por la cada vez más notoria incapacidad del Gobierno de Venezuela para prevenir y desactivar los sucesivos brotes de violencia protagonizados por gentes afectas al régimen, y por la actitud autoritaria y represiva con que el Ejecutivo del presidente Maduro se emplea contra la sociedad civil venezolana”. Según ha denunciado, “esta deriva alimenta una revuelta que arroja ya un balance trágico de 90 víctimas mortales en menos de 100 días ininterrumpidos de protestas”.

Los nacionalistas han mostrado también su rechazo a las elecciones, “pretendidamente constituyentes”, del próximo 30 de julio porque “tratan de suplantar el mandato democrático, otorgado a la actual Asamblea Nacional por el Pueblo Venezolano, en un intento desesperado de Maduro por mantenerse en el poder a costa de aniquilar un sistema de libertades ya gravemente deteriorado”.

También ha manifestado su “desasosiego por el presente y futuro de una población que sufre la carencia de alimentos y medicinas básicos, lo que provoca, entre otros males, malnutrición infantil y muertes prematuras en un contexto de abandono de las responsabilidades gubernamentales para detener una crisis humanitaria de magnitudes crecientes y alarmantes”.

Tras expresar su “grave preocupación ante la agudización de la polarización en la sociedad venezolana, con el consiguiente peligro de la confrontación civil que amenaza con desgarrar definitivamente el tejido social del país”, el PNV ha apelado a la comunidad internacional, en general, y a la latinoamericana, en particular, a que se comprometa “a impulsar, con los representantes legítimos del país, un acuerdo de unidad nacional en Venezuela, restaurando la democracia y evitando una innecesaria escalada de tensiones de consecuencias incalculables pero, a buen seguro, trágicas”.