PNV cree que unas nuevas elecciones causarían una fractura con la ciudadanía

El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha considerado, ante el escenario político provocado por los comicios generales del pasado domingo, que “a nadie le interesa” la convocatoria de unas nuevas elecciones, porque “supone asumir un riesgo de fractura entre la política y la ciudadanía altísimo”.

El dirigente nacionalista, en una entrevista publicada en el diario El Correo, ha advertido de que la respuesta ciudadana a unas nuevas elecciones “podría ser imprevisible”.

Según su análisis, “el domingo más de la mitad de la población votó con las tripas, contra alguien. Y el voto a los partidos tradicionales ha sido un voto numantino, porque lo que venía les daba pavor. Si encima de eso la ciudadanía percibe que los políticos han fracasado a la hora de traducir su voto a las instituciones, no sé lo que pasaría. Probablemente, el sopapo iba a ser sonoro”.

Ortuzar ha vaticinado que la actual legislatura será corta y ha planteado aprovecharla para ir negociando una reforma constitucional que pueda ver la luz en la siguiente legislatura.

Según ha indicado, “el PP no puede tenernos a todos de rehenes” y “no podemos permitir que un partido que tampoco tiene mayorías por sí solo para propiciar cambios, ni siquiera para formar gobierno, nos tenga paralizados a todos”.

El dirigente nacionalista, que ha indicado que “el 20-D ha sido un sopapo a la vieja política y aún no hemos visto autocrítica de quienes la representan”, ha asegurado que el PNV no va a apoyar la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, “salvo que haya una transformación que ahora no se atisba”.

Asimismo, ha opinado que “el voto del PNV que se ha ido a Podemos” en las elecciones generales volverá a la formación nacionalista en las autonómicas y ha afirmado que le ha sorprendido que EH Bildu apueste ahora por modular su agenda soberanista tras sus malos resultados electorales.

Ha señalado que la izquierda abertzale tiene “un problema interno de definición, de coherencia”, y le ha aconsejado “realismo” y “dejar de ser tan 'guays'”.

Asimismo, ha considerado difícil que el PNV pueda tener como socio a Podemos, porque ve a esta formación todavía “en construcción”.

Respecto al proceso soberanista en Cataluña, el presidente del PNV ha afirmado que no ve “un proceso cimentado en el apoyo de las CUP. El nacionalismo tendrá que elegir”, ha señalado.