El PP dice que habrá acuerdo sobre el déficit y el PSOE ve al Gobierno “desnortado”

El PP se ha mostrado hoy seguro de que, al final, habrá acuerdo sobre el reparto del déficit entre las autonomías, mientras que el PSOE cree que la reunión de ayer de Mariano Rajoy con los barones de su partido ha evidenciado el “desnorte político” del Ejecutivo.

Un día después de ese encuentro y en la víspera de conocerse si la UE relaja el objetivo del déficit para España, los dirigentes autonómicos del PP se han mantenido en las posiciones que expresaron ayer al término de esa reunión, en la que acordaron darse un mes de plazo para lograr un acuerdo y que primen los criterios “objetivos y no políticos”.

Es lo que ha destacado el presidente del PP-A, Juan Ignacio Zoido, quien afirma que Rajoy, “jamás se regirá por criterios de partido” a la hora de fijar el objetivo de déficit.

El Gobierno de Andalucía -que pide un reparto equitativo del margen de flexibilidad que conceda Europa- ha aprovechado el encuentro de ayer para reclamar al Gobierno la revisión del sistema de financiación autonómica.

Su portavoz, Miguel Ángel Vázquez, ha dicho hoy que “si Andalucía tuviera la financiación que Extremadura, tendría superávit”.

Y es que la atención mediática estaba hoy en las comunidades donde no gobierna el PP, especialmente en Cataluña.

El conseller de Presidencia y portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, ha pedido hoy mismo al Gobierno que fije cuanto antes los objetivos de déficit para todas las comunidades y ha añadido que, en esa negociación, Cataluña no tendrá privilegios porque tampoco los pide.

“Que nadie sufra que no habrá ningún privilegio para Cataluña, es que tampoco lo pedimos”, ha afirmado Homs quien ha eludido hacer más comentarios sobre la reunión del PP.

Por último, el portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha reclamado que Euskadi sea “justamente recompensada” en el reparto por el “esfuerzo no desdeñable” que ha hecho para cumplir el objetivo fijado.

El portavoz ha subrayado la “biletaralidad” de los gobiernos central y vasco en este asunto gracias al Concierto Económico y ha añadido que por ello Euskadi no tiene que participar en “debates ajenos” ni en “la controversia” entre las autonomías sobre cómo repartir esa capacidad adicional de endeudamiento.

Mientras, en el Congreso, el portavoz del PP, Alfonso Alonso, ha reconocido que hay posiciones distintas entre las autonomías, también en su partido, pero se ha mostrado convencido de que al final el consenso se logrará.

La portavoz del PSOE, Soraya Rodríguez, ha asegurado que la reunión de Rajoy con sus presidentes autonómicos fue un “fracaso” y ha criticado la “falta de dirección política” del Gobierno porque “nadie monta una escenografía semejante para escenificar un desacuerdo”.

El primer presidente autonómico en referirse hoy al asunto ha sido el madrileño Ignacio González, quien insiste en rechazar el concepto de déficit asimétrico porque supondría enviar un mensaje “letal” de que “cumplir o incumplir no tiene un tratamiento distinto”, y asegura que, si finalmente se aprueba, tendrá “carácter excepcional”.

También el presidente cántabro, Ignacio Diego, se opone a los objetivos diferenciados aunque hoy ha dicho que, si finalmente se aplican, propone un déficit primario común, esto es, sin incluir los intereses de la deuda al realizar el cálculo.

El Gobierno extremeño ha valorado que se empiece a hablar de “algún mecanismo de compensación” para las comunidades autónomas cumplidoras, mientras que el Ejecutivo aragonés recalca que cumplirá con el déficit del 1,2 por ciento, sea cual sea el objetivo que marque el Ministerio de Hacienda.

En la misma línea, el jefe del Ejecutivo riojano, Pedro Sanz, ha considerado que los riojanos no verían bien que su presidente pidiese que le autorizaran un mayor déficit porque ello significa “pedir más deuda y más créditos” y ha abogado por “traer más dinero” en la reforma del sistema de financiación autonómica.

Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta de Galicia, ha destacado el “avance evidente” que hubo en la reunión con Rajoy y ha hecho hincapié en que “no puede ser” que haya acuerdos “no conocidos” o “a la carta” en los criterios de reparto.