El PP reconoce que ni soñaba con lograr 137 escaños
Los primeros sorprendidos por el resultado obtenido el 26J fueron los propios cargos del PP. Todos aspiraban a superar los 123 escaños de seis meses antes y a traspasar el umbral del 30% de porcentaje de voto. También imaginaban que Ciudadanos se deshincharía lo suficiente como para dejar de exigir con vehemencia la cabeza de Mariano Rajoy a cambio de apoyar al PP para formar gobierno. Todos los objetivos se cumplieron. Con lo que no soñaban la mayoría de sus dirigentes era con aumentar en 14 el número de diputados y que entre ellos y los socialistas mediaran 50 escaños de distancia.
Pablo Casado participó en una porra electoral con Francisco Marhuenda, quien siempre defendió que el PP acabaría la jornada electoral con 135 diputados. El director de La Razón contemplaba también la posibilidad de que el partido del Gobierno pudiera quedarse muy por debajo de los 123 y afirmaba que, en ese caso, la continuidad de Rajoy estaría en peligro.
Dos días después de tuitearlo, el periodista que fue jefe de gabinete de Rajoy precisaba en La sexta noche que así el candidato del PP “pegaría un revolcón al rojerío nacional” y se reafirmaba en su pronóstico. El vicesecretario de comunicación fue mucho menos optimista. En la porra electoral que cruzó con él, la apuesta de Casado fue mucho más modesta y se quedó en 130, lo que prueba que la dirección del PP confiaba en mejorar el saldo, pero no tanto.
La encuesta que sí se acercó fue la de NC Report para La Razón, que fijó el resultado del PP en 131 escaños. El último tracking para el periódico situaba en un máximo de ocho la mejora respecto del 20 de diciembre.
Variación del voto del PP respecto al 20D
