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El PSOE repite el programa del 20D y lo aliña con medidas de empleo y contra los paraísos fiscales

Pedro Sánchez saluda a militantes en el acto de apertura de campaña

Irene Castro

El PSOE aprobó a mediados de mayo su programa electoral. Esta vez no hubo discusión porque era el mismo con el que Pedro Sánchez concurrió el 20D. La dirección socialista pretende basar su campaña en propuestas, pero reconoce que lo tendrá complicado y acusa de las dificultades a PP y Podemos por la “polarización”. El equipo de campaña intenta revender sus medidas con distintos formatos para fijar posiciones, pero las novedades hasta ahora solo afectan a la lucha contra los paraísos fiscales y, en menor medida, al empleo. 

En Ferraz se esfuerzan por que se hable de sus propuestas, aunque en el Comité Electoral admiten que lo tienen complicado. El PSOE ha presentado con distintas modalidades medidas para el 26J que ya se formularon hace cinco meses. Primero fueron los 'Seis principios para el Gobierno del cambio' con los que Sánchez se comprometía a varias líneas básicas de actuación si llega esta vez a Moncloa. Después presentó los 'Compromisos para el Gobierno del cambio', un documento de 18 páginas que el PSOE explicó como una suerte de programa en miniatura y con una “calendarización”, es decir, con promesas temporales de cumplimiento.

Sánchez optó en los días siguientes por desgranar su programa por temáticas. Presentó un Plan de Emergencia Social en el que se repetían las medidas estrella del 20D, como un ingreso mínimo vital para las familias que no perciben ningún ingreso. Tres días después el foco estuvo en las medidas para mejorar el medioambiente, pero apenas tuvo repercusión. En ese documento no había ninguna novedad, como reconocen fuentes oficiales del PSOE. 

Solo las áreas de empleo y lucha contra el fraude han sido, por el momento, las únicas que se han aderezado. En materia laboral, se mantiene el espíritu del programa del 20D con algunas especificaciones nuevas. Así, el documento que desgranó Sánchez el pasado día 7 de junio  junto a Susana Díaz en un desayuno informativo prevé una subida de un 4% del salario mínimo para 2016. El programa del 20D no lo precisaba y el acuerdo con Ciudadanos lo fijaba en un 1%. Para cumplir la promesa de que alcance el 60% del sueldo medio en España se debe acelerar la subida.

Sánchez revende como nuevas medidas que ya estaban en sus promesas para el 20D. Así, ha revelado como nuevo un plan extraordinario para el empleo que incluye un plan de empleo público para 200.000 parados de larga duración. Esa propuesta se anunció en noviembre de 2014 bajo el nombre Garantía +45 y fue la secretaria de Empleo, Mari Luz Rodríguez, la encargada de defenderla. Lo mismo sucede con el plan de formación para 500.000 jóvenes desempleados que no terminaron la ESO. La diferencia es que la medida anunciada para el 20D pretendía llegar a 700.000 personas. Las ayudas a empresas para contratación de trabajadores de colectivos vulnerables a través del pago de sus cotizaciones a la Seguridad Social fue una de las propuestas que Sánchez llevó a las negociaciones de la investidura

El texto defendido recientemente por Sánchez no recoge la “derogación” total de la reforma laboral, pese a que él lo dice en sus intervenciones, sino que se refiere a la eliminación “de los elementos más lesivos de la reforma laboral del PP”, como la prioridad de los convenios de empresa sobre los de rango superior o la capacidad unilateral del empresario de modificar sustancialmente las condiciones de trabajo. El PSOE sostiene que, en la práctica, eliminará la totalidad de la reforma de Rajoy pero en dos fases: una inmediata vía Real Decreto y otra a través de le negociación de los sindicatos y la patronal. Sánchez siempre ha reconocido que no volvería a los 45 días de indemnización por despido. La desaparición en el borrador del programa de la derogación total de la reforma laboral generó una importante polémica durante su elaboración y, finalmente, la dirección socialista se vio obligada a incluirla

En lo que sí ha innovado más el PSOE ha sido en las propuestas de lucha contra el fraude después de que se hayan publicado los Papeles de Panamá y de la Castellana. Los socialistas han elaborado un paquete de medidas para acabar con los paraísos fiscales entre las que incluyen la prohibición de que las empresas que operan desde esos lugares puedan acceder a contratación pública, entre otras.

Ferraz insiste en que a lo largo de la campaña soltará nuevos anuncios, pero mantiene la incógnita incluso sobre las temáticas. La aprobación del programa deja poco margen de maniobra a Sánchez para incluir novedades. De hecho, el texto es el mismo que el 20D y las pocas incorporaciones se han realizado en documentos por separado. El principal cambio ha sido la portada en la que se ha incluido la imagen de campaña.

El PSOE ha incumplido su promesa de presentar junto a cada medida la memoria económica de cómo se sufragaría, tal y como reconocen fuentes de la Ejecutiva a eldiario.es. La responsable de Estudios y Programas, Meritxell Batet, se comprometió al presentar el borrador del programa a presentar más adelante, pero aún no se ha hecho. “Es un programa de gobierno con voluntad de construir un modelo de país, no solo un programa de cuatro años. Hay muchas medidas que requerirán luces largas -explicó entonces Batet-. Lo que incluimos es para cumplirlo. No vamos a incluir nada que pensemos que no podemos hacer”.

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