Partidos españoles esperanzados tras reunión con representante UE para Cuba

Los grupos políticos del Congreso de los Diputados de España se mostraron hoy esperanzados en que pueda haber avances en los contactos entre la UE y Cuba para firmar un acuerdo político tras mantener una reunión con el encargado de las relaciones de la Unión Europea con la isla del Caribe.

El director general para las Américas del Servicio Europeo de Acción Exterior, Christian Leffer, participó hoy en un almuerzo en el Congreso de los Diputados, en Madrid, junto con representantes de varios partidos para ponerles al tanto del diálogo con Cuba.

La UE y Cuba negocian actualmente un acuerdo de diálogo político y de cooperación cuya tercera ronda tendrá lugar el 4 y 5 de marzo en La Habana.

Entre los asistentes estuvo el secretario cuarto de la Mesa de la Mesa del Congreso, Teófilo de Luis, del Partido Popular -en el Gobierno- y el diputado Juan Moscoso del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) -la mayor formación de la oposición.

En declaraciones a Efe, De Luis explicó que, según Leffer, las negociación van a precisar “un tiempo de maduración lento y que cualquier acelerón no sería acertado”, por lo que será preciso “tomarlo con prudencia”.

“Me ha dejado muy tranquilo y contento ver la seriedad de Europa, que mantiene las cláusulas democráticas sobre la mesa. Cualquier perjuicio a los derechos humanos implicaría la suspensión de cualquier acuerdo”, comentó De Luis tras la información recibida del alto funcionario comunitario.

El diputado del PP le ha manifestado la necesidad de sincronizarse con Estados Unidos tras la apertura en las relaciones entre este país y el régimen castrista.

Los portavoces se han comprometido a informar a Leffer de los contactos que mantienen con la disidencia cubana para que disponga de “información veraz” sobre la situación de este colectivo y las detenciones que puedan sufrir.

De lo expuesto por Leffer, el socialista Juan Moscoso ha destacado la “actitud positiva” del Gobierno castrista para propiciar el acercamiento y alcanzar un acuerdo que sería “muy positivo para los cubanos y para Europa en su conjunto”.

En declaraciones a EFE, Moscoso expresó su confianza en que se pueda rubricar este acuerdo para acabar con la llamada posición común, fijada en 1996, que condicionaba la normalización de relaciones a los avances que debía dar el régimen cubano hacia la democracia, la liberación de todos los presos políticos y la mejora de los derechos humanos.

Según Moscoso, la posición común se ha demostrado que “es estéril para alcanzar los supuestos objetivos que en su día se marcó y que desde el PSOE nunca se apoyaron”.

En la reunión, también se consideró que Venezuela ha perdido influencia en Cuba, lo que está llevando al régimen de Castro a “buscar otros socios”.