Pedro Sánchez dice que su plan para Cataluña es la reforma de la Constitución y es lo que ofrecerá si gana

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha insistido este jueves en que, si llega a la Presidencia del Gobierno, su “plan” es “llamar a todas las fuerzas políticas para abrir un proceso de reforma constitucional”. Y, según ha dicho, es lo que hará aunque el próximo 27 de septiembre surja un gobierno independentista en Cataluña.

Así lo ha asegurado el líder de los socialistas en una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press, en la que ha defendido que todavía hay tiempo para resolver mediante el diálogo y el acuerdo la cuestión catalana.

Sánchez ha insistido en que la Constitución tiene mecanismos y cauces “para resolver desde la política una crisis política”. Por eso, los socialistas abogan por la reforma constitucional, porque creen que España “necesita un nuevo acuerdo constitucional” para solucionar “esta crisis política”.

De esta forma, ha instado al resto de fuerzas políticas a dejar de lado a los tribunales, “los golpes de pecho” y los “reproches”, porque está convencido de que “hay soluciones”.

Además, y pese a que la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas otorga una amplia mayoría a la lista proindependentista, Sánchez ha subrayado que “desde el punto de vista social el independentismo no parece mayoritario” y se ha mostrado convencido de que el PSC va a ser la segunda fuerza política.

Por eso, y ante la pregunta de si los socialistas apoyarían a la candidata de Ciudadanos a la Generalitat, Inés Arrimadas, ha replicado que es el líder de este partido, Albert Rivera, el que tiene que decir si apoyarían al primer secretario del PSC, Miquel Iceta.

Pero, en cualquier caso, ha subrayado que ve “contradictorio” que Ciudadanos apoye en la Comunidad de Madrid al PP, que tiene “un discurso anticatalanista”, y luego pretenda recabar el apoyo de los socialistas en Cataluña.

De la misma manera, ha vuelto a rechazar la oferta de pacto que ha hecho el candidato del PP a la Generalitat, Xavier García Albiol, a Ciudadanos y el PSC para frenar al independentismo. A su juicio, es “un ejercicio de cinismo político”, porque un día antes de “tender la mano a los socialistas”, el PP aprobó llevar al Congreso la modificación “unilateral” del Tribunal Constitucional.

De hecho, ha aprovechado para denunciar que el presidente del Gobierno “todavía” no se ha puesto en contacto con él para informarle de esto y sólo hubo una llamada, “una hora antes” al Grupo Socialista. “A Rajoy le dijo que se acabó la broma, el PSOE, que representa a millones de españoles, no se le trata y menosprecia como ha menospreciado Rajoy”, ha denunciado.

Pero, y como es “una persona educada”, ha respondido a García-Albiol para, de esta manera, decirle que no acepta su oferta de pacto. “Declino su propuesta porque no tenemos nada que ver unos con otros”, ha insistido.

Además, el secretario general del PSOE ha avisado al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, de que el “tapón” para aprobar esos cambios en la Constitución que ha defendido es “su jefe”, el presidente del Gobierno, que no quiere reformar la Carta Magna.

¿POR 3.000 MILLONES UNA QUIEBRA QUE PUEDE LLEVAR A LA INDEPENDENCIA?

Sánchez ha insistido en que la solución al problema catalán debe ser dialogada y ha recurrido al libro del exministro Josep Borrell para defender que las diferencias son “escasas”. Así, ha reconocido que, como dice en su obra, existe un déficit fiscal con Cataluña de 3.000 millones de euros, pero se ha preguntado si eso justifica “toda esta confrontación, esta quiebra emocional, no solamente económica y social, que puede llevar a la independencia de Cataluña”.

“Tenemos que ofrecer soluciones y en eso está el PSOE”, ha remachado Sánchez, insistiendo en que, en esta campaña, los socialistas salen “a ganar, a frenar el independentismo”. “Tenemos una campaña por delante y veremos cuál es el resultado final”, ha remachado.