Piden la liberación de tres periodistas detenidos en Birmania

Parlamentarios del Sudeste de Asia exigieron hoy a las autoridades de Birmania (Myanmar) la liberación incondicional y retirada de cargos contra tres periodistas detenidos el mes pasado tras visitar una zona controlada por las guerrillas.

Los reporteros Thein Zaw, del portal Irrawaddy, y Aye Nay y Pyae Phone Aung, de Democratic Voice of Burma, fueron arrestados el 26 de junio junto tres guías en el estado Shan, en el noreste del país, tras cubrir un acto contra las drogas organizado por el Ejército de Liberación Nacional Ta'ang (TNLA).

Los periodistas comparecieron ayer por sorpresa ante el juez que fijó el inicio del juicio el 28 de julio en el que se enfrentan a acusaciones de asociación ilícita, y violación de la controvertida ley de telecomunicaciones, entre otros.

La organización Parlamentarios del Sudeste de Asia para los Derechos Humanos (APHR) exigió que se desestimen los cargos y pidió al gobierno que lidera Aung San Suu Kyi a enmendar las leyes en las que se basa una acusación que calificó de “abuso”.

“Las autoridades de Myanmar deben liberar inmediatamente y retirar todos los cargos contra los tres periodistas, que han sido acusados con débiles pretextos por simplemente hacer su trabajo”, dijo el presidente de APHR, Charles Santiago, en un comunicado.

La organización denunció la persecución de las libertades de prensa y de expresión desde que el movimiento democrático de Suu Kyi se hizo con el gobierno en 2016 con al menos 71 personas detenidas acusadas de difamación en las redes sociales.

En TNLA es una de las organizaciones armadas que no ha firmado ningún acuerdo de alto al fuego con las autoridades y que mantiene los combates con el Ejército en el noreste del país.

En un informe reciente, AI acusó al Ejército birmano de perpetrar abusos contra la población civil en los estados Shan y Kachin, incluidas torturas, ejecuciones extrajudiciales, bombardeo indiscriminado de aldeas y restricciones a la ayuda humanitaria.

El informe también acusaba al TNLA de abusos contra civiles, incluida el reclutamiento forzoso y la recaudación de impuestos forzados.