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Podemos comienza a decidir

Pablo Iglesias en la clausura de la Asamblea Ciudadana de Podemos. / Marta Jara

Andrés Gil

El himno de la Transición ha puesto música y letra a la asamblea de Podemos. L'estaca, que evoca el tiempo que alumbró una cultura y un sistema, “el régimen del 78”, que Podemos quiere derribar, ha sonado este domingo en el cierre de la asamblea constituyente. Ha sido cantada por los principales dirigentes del partido en el escenario, y acompañados por los varios miles de simpatizantes, puño en alto, que apuraban por la tarde los últimos minutos de un congreso que ha durado día y medio: “Si jo l'estiro fort per aquí i tu l'estires fort per allà, segur que tomba, tomba, tomba, i ens podrem alliberar”.

“No nos miremos a nosotros mismos, sino hacia fuera. Hoy nace una nueva fuerza política para cambiar el país: ¡Claro que Podemos!”. Con estas palabras, Pablo Iglesias ha cerrado la asamblea y ha inaugurado todo el proceso de votación. 130.000 personas registradas. Diferentes propuestas organizativas, políticas y éticas. Y siete días para votar. El lunes 27, a mediodía, se conocerán los resultados.

Entonces, se sabrá cómo irá Podemos a las municipales y autonómicas. “Todas las posiciones de la lista se deben elegir en elecciones primarias y abiertas; que no sea una sopa de siglas de lo viejo; que no aspire a unir al margen izquierdo, sino que sea una candidatura que habla a la mayoría ciudadana”, ha expuesto Íñigo Errejón, del equipo promotor. “Queremos que los círculos puedan decidir si van o no, y que haya alcaldes de Podemos por toda España”, ha exclamado Teresa Rodríguez, miembro del mismo equipo que Pablo Echenique, quien ha recibido un sonoro aplauso cuando ha llegado a Vistalegre. Es decir: si los círculos han de seguir las líneas maestras marcadas por la dirección o pueden tener independencia para decidir, cómo, cuándo y con quién.

¿Qué pasará con los Ganemos? ¿Qué hará Podemos? ¿Habrá espacio para la convergencia que se reclama desde otras fuerzas sociales y políticas, como IU o Equo, por ejemplo? “Donde lo viejo se haya comprado un traje nuevo, se llame Ganemos o se llame como se llame, construiremos candidaturas municipalistas, miles de candidaturas”, ha zanjado Errejón en un mensaje tanto para el interior como para el exterior.

Este domingo era el día para las propuestas políticas, pero también para las organizativas, cuyo debate ya se adelantó el sábado: ¿un secretario general o tres?, ¿25% de la dirección por sorteo o no?, ¿doble militancia o no? Esta semana se votarán los dos modelos, porque en estos asuntos no se ha fraguado el acuerdo. “Con el consenso no se gana el cielo, el cielo se gana al asalto”, sentenció Iglesias el sábado. Y así será. Se votará: “El congreso no es de cartón piedra”, repite Errejón; “No hay miedo a discutir”, tercia Iglesias; “Decide la gente”, abunda Monedero.

Si los simpatizantes de Podemos, no deciden, como dice Errejón, “lo menos improbable”, Pablo Iglesias y su equipo ganarán en las votaciones. Y, si eso es así, además, se producirá la paradoja de que Teresa Rodríguez, una de las voces discordantes –“polifonía”, como dice ella–, no podrá aspirar a un puesto en la dirección, salvo que deje la militancia de Izquierda Anticapitalista: “Yo me voy a presentar, las elecciones no las gana un secretario general ni tres, sino la gente”.

Más que “echarse a un lado”, como propone el equipo de Iglesias a aquellos que salgan derrotados de este proceso, Rodríguez habla de dar “100 pasos al frente”, defiende su propuesta como la que representa mejor Podemos y apela a la singularidad regional frente al “centralismo complutense”.

Pero todo esto se definirá en una semana. “Yo soy un militante”, ha dicho Pablo Iglesias, “no un macho alfa, me pongo a las órdenes de quien haya demostrado que cuenta con el apoyo de la mayoría”, en una intervención en la que ha demostrado su ascendencia ante la militancia al pedir “ssshhhhh, ni un aplauso” y así, de paso, evitar una competición de aplausos, que podría haber tenido algunas consecuencias, entre él y el grupo de Echenique. “En esas condiciones, no”, ha sentenciado, para recordar que sólo seguirá al frente de Podemos si el partido adopta su modelo organizativo y estratégico. Sin embargo, nadie en Podemos se imagina un Podemos sin Pablo Iglesias al frente.

Una vez que concluyan las votaciones sobre el modelo de Podemos, se volverá a votar: comenzarán las primarias para elegir los miembros de la dirección. Entre el 28 de octubre y el 5 de noviembre se presentan las candidaturas; el 8 de noviembre habrá un encuentro retransmitido de candidatos; entre el 10 y el 14 de noviembre se producirán las votaciones; y el 15 de noviembre se presentarán los resultados.

También han votado los simpatizantes en estos días –38.279 personas– diferentes resoluciones. Se han aprobado cinco de entre 103 opciones, a través de Agora Voting: sobre educación (17.289 votos), anticorrupción (16.186 votos), vivienda (14.889 votos), sanidad (12.129 votos) y auditoría de la deuda, con 8.981 votos. Son textos que marcan la línea política de Podemos sobre estos cinco asuntos concretos.

La auditoría de la deuda, explicada por la profesora de Economía Aplicada Bibiana Medialdea, supone una concreción sobre el programa electoral presentado para las europeas del 25M, en el que se hablaba de “declarar el impago” de la “deuda pública y privada ilegítima”. Ahora, como ha explicado Medialdea, se desarrolla el concepto y se habla de “reestructuración ordenada de la deuda”. “El objetivo no es no pagar la deuda, es recuperar un nivel de endeudamiento y una senda de sostenibilidad de la misma que posibilite la recuperación de los niveles de bienestar de la población, así como la transformación de un modelo productivo que, de no hacerse, condenará a la economía española a una situación de dependencia y subdesarrollo indigna de las posibilidades y potencialidades de nuestra sociedad”, reza el documento.

El texto sobre vivienda fue defendido por Carlos Huerga, Irene Montero y Rafael Mayoral, y reclama “derechos habitacionales para todas y todos de acuerdo a los estándares internacionales de Derechos Humanos”; “derecho a la dación en pago con carácter retroactivo, que implica acabar con las deudas perpetuas derivadas de los préstamos hipotecarios”; “procedimientos judiciales con todas las garantías” y “fin de la impunidad financiera y apertura de una auditoría social”.

La resolución que no ha conseguido votos suficientes es la de feminismo, a pesar de ser una de las más populares en Plaza Podemos y de contar con el apoyo de las principales caras de Podemos: Carolina Bescansa, Pablo Echenique, Íñigo Errejón, Teresa Rodríguez, Miguel Urbán, Beatriz Gimeno y Luis Alegre, entre otros.

Podemos ya está en la fase de decisiones, dándose forma organizativa, pero también ideológica. Incluso ha levantado una bandera que no ha exhibido mucho, la de la memoria histórica. Antes de sonar L'estaca, Monedero ha entonado: “Fuisteis vosotros los que trajisteis la democracia, no fue el rey ni Fraga”. Y, a continuación... “Si jo l'estiro fort per aquí i tu l'estires fort per allà, segur que tomba, tomba, tomba, i ens podrem alliberar”.

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