El Polisario celebra su XIV congreso sin descartar una vuelta a las armas

El Frente Polisario celebrará a partir de mañana en los campos de refugiados de Tinduf su 14 congreso general con una disyuntiva sobre la mesa procedente de la calle: proseguir con el proceso político tutelado por la ONU, como quiere gran parte de la vieja guardia, o retomar las armas, como desean los jóvenes.

Según explicó hoy a Efe el ministro saharaui de Cooperación Internacional, Ibrahim Mujtar, alrededor de 2.500 delegados se reunirán desde mañana miércoles hasta el domingo en el campamento de Dahla, el más afectado por las recientes lluvias torrenciales, para discutir las estrategias de los próximos cuatro años.

El objetivo, no obstante, es el mismo: avanzar en el camino de la autodeterminación y la independencia del territorio saharaui, explicó el responsable.

Para ello, el Polisario discutirá posibles enmiendas a la actual Constitución, y elegirá una nueva dirección del Frente surgido en la década de 1970, ahora encabezado por el presidente de la proclamada República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz.

“El congreso va debatir temas fundamentales que se presentarán al comité preparatorio. Hablaremos de nuestra Constitución y veremos las enmiendas que podríamos aportar”, señaló Mujtar.

“Igualmente elegiremos una nueva dirección del Frente Polisario o repetimos la misma porque el congreso tendrá que elegir una dirección política”, agregó el ministro, uno de los hombres más influyentes de la organización y uno de los que apuestan por aumentar la presión sobre Marruecos y la comunidad internacional.

En una entrevista exclusiva concedida a Efe en el campamento de Bujari el día en que se recordó el 40 aniversario de la ocupación de Marruecos de la antigua colonia española, también conocida como “la Marcha Verde”, Mujtar ya habló abiertamente de la posibilidad de una vuelta a las armas.

Según dijo entonces, la presión de las nuevas generaciones frente al diálogo con la ONU, que perciben como una pérdida de tiempo que solo favorece a Marruecos, es cada vez mayor en todos los campos de refugiados.

“Son elecciones libres y cualquier saharaui participante en el congreso, si cumple con los requisitos tiene derecho a presentarse a los puestos de responsabilidad, desde el secretario general a los miembros de secretaria nacional”, afirmó.

Diferentes congresistas no descartan, por su parte, que gracias a este proceso puedan ascender en el escalafón nuevos rostros que apoyen esa vía más dura, que devolvería el conflicto a los años setenta y ochenta cuando el Frente Polisario se enfrentó militarmente a Rabat.

“Elaboraremos la estrategia a seguir en lo que respecta al mantenimiento del diálogo con las Naciones Unidas o otra forma si se ve que el proceso de paz está bloqueado”, comentó el ministro

Este congreso, que se celebrará bajo el lema “Fuerza, planificación y voluntad para imponer la independencia nacional y la soberanía”. especifica las “vías claras para acelerar el proceso de la liberación de nuestro país”, agregó.

Junto a los 2.500 congresistas, viajarán al poblado de Dahla, destruido en un noventa por ciento por las lluvias torrenciales de este otoño, representantes de “países amigos” de África, América Latina, Asia y Europa

El ministro saharaui subrayó, asimismo, que este congreso acontecerá en un contexto internacional, regional y local “muy especifico”, caracterizado por lo que está sucediendo en la región del Norte de África y en otras zonas del mundo árabes, en alusión al auge del yihadismo.

“Ha llegado el momento de que se acabe con un conflicto que dura más de 40 años y de que el pueblo saharaui recupere su territorio. 40 años son suficientes”, apostilló Mujtar.

El proceso saharaui lleva años estancado debido a las posiciones encontradas que mantienen ambas partes del conflicto: mientras que la RASD reclama celebrar un referéndum de autodeterminación, Rabat se opone frontalmente a esta opción y propone otorgar más autonomía a la antigua colonia española, pero siempre bajo soberanía marroquí.

El congreso se celebra en un momento en el se repiten los llamamientos a reactivar las negociaciones por parte del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, quien tiene previsto visitar los campamentos donde viven más de 160.000 saharauis refugiados a principios de enero.