Puig insta a no tener “miedo” a reformar la Constitución, un documento “vivo”

El presidente de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig, ha instado al resto de partidos a no tener “miedo” a la reforma de la Constitución española ya que es un “producto vivo” que debe “adaptarse a las necesidades de la sociedad en cada momento histórico”.

Así lo ha afirmado durante el solemne acto de la Generalitat en Alicante por el día de la Constitución, donde ha entregado la primera Distinción para la Defensa de los Derechos y Libertades, a título póstumo, al alicantino Miquel Grau, según la Ley de la Memoria Histórica la última víctima de la violencia contra los luchadores de la Democracia (1977).

Puig ha declarado que en 1978 España se dotó “de un buen barco y unas buenas velas, pero la travesía continúa” y “petrificar los acuerdos de convivencia es condenarse al fracaso ante una sociedad que se transforma todos los días, que evoluciona y cambia”.

“La reforma de la Constitución no supone un salto al vacío, un riesgo de inestabilidad. Todo lo contrario: la inestabilidad nace cuando se reprimen las preferencias de los ciudadanos”, ha incidido el presidente, quien ha defendido “un modelo federal que garantice la igualdad de los ciudadanos y la singularidad de los territorios”.

Puig ha advertido contra aquellos que “desconfían de los procesos que la propia Constitución contempla para su reforma, como si éstos fueran añadidos meramente ornamentales”, y ha asegurado que “temer el cambio supone temer la voluntad del pueblo soberano, dudar implícitamente de su madurez y responsabilidad”.

En un discurso parte en castellano y parte en valenciano, ha recordado que ésa es “una duda similar a la que algunos esgrimían en la Transición cuando afirmaban que España no estaba preparada para la Democracia, y propugnaban el miedo para ocultar sus prejuicios”.

“La sociedad ha cambiado y hemos de adaptar nuestros acuerdos constitucionales a las nuevas circunstancias porque no sólo se trata de hacer valer los derechos reconocidos -ha argumentado- sino de reconocer nuevos derechos y dar más garantías a los ya existentes”.

Puig ha puesto como ejemplo la “lección de nuestros amigos alemanes”, que han modificado su Carta Magna 60 veces en casi 60 años, y ha insistido en que en España hay que hacerlo “por muchas razones”.

El acto en el alicantino castillo de Santa Bárbara, presidido por Puig y al que ha acudido su Consell al completo, se ha celebrado en la misma ciudad y una hora y media después de otro acto de tributo a la Carta Magna organizado por la Diputación de Alicante, a la que ha acudido el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo.