Putin llega a El Cairo para reforzar su amistad con Al Sisi

El presidente ruso, Vladímir Putin, llegó hoy a El Cairo para una visita de dos días en la que pretende reforzar las relaciones con su homólogo egipcio, Abdelfatah al Sisi, en su primer viaje diplomático a Egipto en diez años.

Los dos presidentes se encontraron en el aeropuerto internacional de El Cairo, donde se saludaron afectuosamente, y después transitaron por las calles de la ciudad en dirección a la Ópera.

La capital egipcia ha aparecido estos días empapelada con varias fotografías del presidente ruso, sobre las que se puede leer en árabe “Marhaba” (bienvenido), en un gesto de acogida.

Putin y Al Sisi asistieron a la Ópera para ver un espectáculo cultural que “ilustra la historia de las relaciones egipcio-rusas”, antes de mantener una cena en un lugar no especificado por razones de seguridad, según un comunicado de la Presidencia egipcia.

Este viaje se produce tras la invitación brindada el pasado agosto por Al Sisi, quien, por su parte, eligió Rusia como uno de los primeros países para visitar tras su llegada a la Presidencia egipcia en junio de 2014.

Mañana, martes, Al Sisi y Putin celebrarán una reunión bilateral y una recepción en la que firmarán una serie de acuerdos y darán una rueda de prensa conjunta.

La Presidencia rusa señaló en un comunicado que Putin abordará con su homólogo egipcio “las perspectivas del desarrollo de las relaciones ruso-egipcias en los ámbitos político, económico, comercial y humanitario”.

En la agenda también está incluido el análisis de la situación de Oriente Medio y el norte de África, en particular Irak, Siria y Libia, así como del conflicto palestino-israelí.

Los medios egipcios otorgan una relevancia similar a esta visita y la muerte anoche de una veintena de personas en actos de violencia ocurridos antes de un partido de primera división en El Cairo.

“Putin, héroe de esta década”, titula el diario oficialista Al Ahram, que acompaña la noticia de una entrevista al presidente ruso, quien dijo que buscará con Al Sisi el inicio de un diálogo sirio “sin condiciones previas y sin intervención externa”.

Con un frente abierto en Ucrania, Putin mira con este viaje a la región de Oriente Medio, donde en el conflicto de Siria apoya al presidente Bachar al Asad.

El presidente ruso también declaró al diario que la crisis ucraniana “está causada por el intento de Estados Unidos de imponer su voluntad en todas las partes del mundo” y aseguró que esto demuestra que la promesa de que la OTAN “no tiene intereses en la zona es solo un disparate”.

Ahora que las relaciones entre El Cairo y Washington no pasan por sus mejores momentos, Putin busca competir con EEUU tendiendo la mano al presidente egipcio, quien necesita aliados económicos y militares que le hagan depender menos de Washington.

El último presidente egipcio con el que se reunió Putin en El Cairo fue el derrocado Hosni Mubarak en 2005, cuando el presidente ruso inició una gira histórica por Oriente Medio para reactivar el papel de Moscú en los esfuerzos para solucionar el conflicto árabe-israelí.

Al igual que los aliados de Egipto en el Golfo Pérsico, Putin ha apoyado a Al Sisi, que en un primer momento fue criticado desde la Casa Blanca, Europa y ciertas organizaciones internacionales por el derramamiento de sangre a raíz del golpe militar que derrocó a Mohamed Mursi en julio de 2013.

La destitución del islamista Mursi, miembro de los Hermanos Musulmanes, organización declarada terrorista por las autoridades, supuso el inicio de una represión contra ese grupo y muchos de sus seguidores, que han sido asesinados, detenidos, encarcelados o expulsados del país.