Putin llega a Irán para reuniones bilaterales y cumbre tripartita

El presidente ruso, Vladímir Putin, llegó hoy a Teherán para reunirse con su homólogo iraní, Hasan Rohaní, y participar en una cumbre tripartita con Azerbaiyán en la que se abordarán las relaciones económicas y la lucha contra el terrorismo.

Al margen de la cumbre con el mandatario de Azerbaiyán, Ilham Alíev, Putin y Rohaní mantendrán un encuentro bilateral para reforzar los estrechos lazos entre ambos países y su posición común respecto al conflicto en Siria y las sanciones de Estados Unidos.

Putin y Rohaní se han reunido en nueve ocasiones. El presidente ruso ya viajó a Teherán en noviembre de 2015, mientras que el iraní lo hizo a Moscú en marzo pasado.

El presidente de Rusia también se entrevistará en la capital iraní con el líder supremo, Ali Jameneí.

Rusia e Irán son los principales valedores del régimen sirio de Bachar al Asad y han auspiciado junto con Turquía las conversaciones de paz sirias de Astaná.

Ayer, el régimen de Al Asad y la oposición siria fueron incapaces de llegar a un acuerdo para el canje de prisioneros de guerra, uno de los principales puntos de la agenda en la séptima ronda de negociaciones de Astaná.

Además del conflicto sirio, se espera que ambos mandatarios traten la imposición de sanciones por parte de Estados Unidos que afecta a los dos países.

El presidente estadounidense, Donald Trump, promulgó en agosto pasado una ley que impone nuevas sanciones contra Rusia por su actividad militar en el este de Ucrania, así como contra Irán y Corea del Norte por sus programas armamentísticos.

Por su parte, la cumbre tripartita entre Irán, Rusia y Azerbaiyán es la segunda después de la celebrada en Bakú en agosto de 2016.

El ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, aseguró que “la cooperación regional es muy útil para el desarrollo económico de los países y para la estabilidad y la paz en la región”.

La agenda de la cumbre incluye desde la lucha contra el terrorismo a la cooperación económica, principalmente el modo de impulsar el corredor de transporte “Norte-Sur”, que une el norte de Europa con la India y los países del golfo Pérsico a través de Rusia, Irán y Azerbaiyán.