Rajoy llega a Nueva York para presidir la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, llegó hoy a Nueva York para presidir el próximo martes una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU en la que se debatirá una resolución sobre la trata de seres humanos en situaciones de conflicto.

El avión de la Fuerza Aérea Española en el que viajó Rajoy y el resto de la delegación española procedente de Madrid llegó poco antes de las 18.00 hora local (23.00 GMT).

El jefe del Ejecutivo español iniciará mañana su agenda en Estados Unidos con una reunión de trabajo que mantendrá con el embajador de España en este país y los embajadores ante la ONU y la Organización de Estados Americanos.

En ella se analizará, entre otros asuntos, la relación del Gobierno con la futura administración estadounidense de Donald Trump, quien tomará posesión el 20 de enero.

Sin embargo, no está previsto que aprovechando la estancia en Nueva York haya una reunión entre ambos, que hace pocos días mantuvieron una conversación telefónica en la que se comprometieron a mantener la relación bilateral y la transatlántica.

En el encuentro con los embajadores españoles, Rajoy tratará también el papel de España en el sistema de Naciones Unidas una vez que abandone el Consejo de Seguridad, y la situación de América Latina.

Será el martes cuando encabezará en Naciones Unidas una reunión del Consejo de Seguridad con motivo de la presidencia española de este órgano de la ONU durante el mes de diciembre y antes de que a final de año España deje de pertenecer al mismo.

En esa sesión se debatirá la resolución sobre la trata de personas en situaciones de conflicto.

La iniciativa para realizar un debate sobre esta materia, según el Gobierno español, surge de la constatación de que los conflictos aumentan el riesgo de que haya trata de personas que grupos armados como DAESH, Boko Haram o algunas bandas criminales utilizan como arma de guerra y de financiación.

El presidente del Gobierno impondrá también el martes una condecoración al secretario general saliente de la ONU, Ban Ki-moon, que abandonará su cargo a final de año.

Además, ese día inaugurará en el Instituto Cervantes de Nueva York una exposición sobre Jorge Luis Borges.