Rivera exige a Puigdemont que “baje del monte” y negocie sobre infraestructuras, financiación o reforma constitucional

“Soy partidario de un diálogo fluido, normal y democrático, pero tienen que bajar del monte y venir a la mesa”, porque “no puedo sentarme con uno que está arriba en la montaña proclamando la independencia”, ha declarado en un desayuno informativo de Europa Press.

Tras criticar los planes de Puigdemont de convocar un referéndum en Cataluña si es factible y su resultado es vinculante, Rivera ha señalado que “es difícil hacer un diálogo con penultimátums” como ese --los independentistas “llevan así desde 2012”, ha dicho-- y con quienes “cuestionan que las leyes hay que cumplirlas”.

“Vamos a sentarnos en la mesa para hablar de temas tangibles”, ha propuesto, mencionando por ejemplo la reforma del sistema de financiación autonómica, un plan de infraestructuras basado en criterios “estratégicos” y una modificación de la Carta Magna para “hacer funcionar mejor España, no para cargársela” con referéndums de independencia.

El líder de la formación naranja considera que “amenazas” como la de Puigdemont sobre el referéndum “están impidiendo el diálogo” que permitiría “legislar sobre lo que une” a los catalanes con el resto de españoles. En este sentido, ha abogado por dejar a un lado los debates “identitarios” y de “sentimientos”.

En relación con el sistema de financiación, ha defendido el principio de corresponsabilidad entre Gobierno central y comunidades autónomas y la clarificación de las competencias y su financiación, y entre las infraestructuras importantes para Cataluña ha destacado el Corredor Mediterráneo.

En cuanto a la reforma constitucional, Ciudadanos querría basarla en el informe de 2006 del Consejo de Estado, que considera “acotado y razonable”. Lo que ha rechazado Rivera es blindar las competencias de Cataluña en materia de educación y lengua, porque ya “son un búnker”.

NO “MINIMIZAR” LO QUE OCURRE EN CATALUÑA

En su opinión, para la cuestión de Cataluña no hay un “solución mágica”, sino que hay que trabajar para involucrar a la mayoría de los catalanes en “un proyecto común español”, de manera que no piensen que separarse de España es la mejor opción.

Lo que no se puede hacer, a su juicio, es “minimizar” lo que ocurre en esa comunidad, como, a su entender, ha hecho el Gobierno tras la manifestación independentista de la Diada celebrada el pasado domingo.

“Miles de personas, legítimamente aunque yo no lo comparta, piensan de una manera que no es mayoritaria pero es muy amplia”, ha señalado antes de añadir que “no es suficiente con hacer cumplir la ley”.