Rusia exige garantías por escrito de los rebeldes para la pausa humanitaria en Alepo

Rusia demandó hoy garantías por escrito de los rebeldes sirios para apoyar el plan humanitario de la ONU para asistir a los civiles sitiados desde hace meses en el este de la ciudad de Alepo.

“Necesitamos firmes garantías oficiales de seguridad por parte de los grupos armados ilegales y de los consejos locales en el este de Alepo de que recibirán la ayuda humanitaria”, declaró Alexéi Borodavkin, embajador ruso ante la ONU en Ginebra.

El diplomático aseguró que Rusia está dispuesta a apoyar el suministro de ayuda humanitaria al este de Alepo, pero agregó que en estos momentos simplemente no se dan las condiciones necesarias para poner en marcha el plan de Naciones Unidas.

Recordó que los rebeldes ya abortaron en dos ocasiones la entrada de productos de primera necesidad y la evacuación de enfermos y heridos después de que Rusia declarara sendas pausas humanitarias en la zona.

Borodavkin resaltó que los rebeldes deben dar claras garantías de que “no dispararán ni intentarán destruir los convoyes humanitarios que se dirigen hacia Alepo”.

“También deben garantizar que no atacarán al personal médico y, naturalmente, a la población local que quiere utilizar los corredores humanitarios habilitados por el Ejército sirio y nuestros militares”, señaló.

Además, Rusia considera “muy importante” que la ayuda humanitaria vaya a parar a los civiles y no a manos de los combatientes, por lo que espera que la ONU asuma compromisos al respecto.

“De lo contrario, todos estos planes humanitarios propuestos por la ONU parecen muy poco convincentes”, dijo.

Por otra parte, criticó las declaraciones del coordinador humanitario para Siria de la ONU, Jan Egeland, de que espera que los Gobiernos de Rusia y Siria den el visto bueno al plan.

“Plantear la cuestión como si ahora esperáramos una reacción por parte de Moscú y Damasco es una declaración provocadora y torpe, y nada más que eso”, dijo Borodavkin.

Egeland aseguró hoy que los grupos armados rebeldes habían dado garantías de seguridad para que la ONU proceda con su plan humanitario, mientras que Rusia ha dado su apoyo verbal y se espera la reacción del Gobierno sirio.

“Se necesita urgentemente distribuir alimentos y material médico, también estamos listos para evacuar a centenares de heridos”, dijo Egeland tras la reunión semanal entre representantes de la ONU y de un grupo de países con influencia en el conflicto sirio.

La aviación rusa suspendió hace más de un mes los bombardeos contra la segunda ciudad siria, aunque la pasada semana lanzó un nuevo ataque masivo contra las posiciones yihadistas en el país árabe.

El presidente ruso, Vladímir Putin, abordó hoy en el Kremlin el conflicto sirio con el secretario general electo de la ONU, António Guterres.