Sánchez marca distancias con Iglesias: internacionalista, no independentista

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha afirmado hoy que España no merece ser gobernada ni por “la pereza de Rajoy” ni bloqueada por “la intransigencia” de Pablo Iglesias, de quien ha dicho que se diferencia en ser “internacionalista, no independentista”.

En un mitin de precampaña en la localidad valenciana de Burjassot ante unas 1.500 personas, Sánchez ha criticado que algunas fuerzas políticas, al paso que van con tantos partidos incorporados a la candidatura, se tendrán que presentar a las elecciones “con papeletas apaisadas”.

La diferencia entre el líder de Podemos y Sánchez es que él es de izquierdas, y la izquierda siempre ha sido “internacionalista, no independentista, y tolerante”, y ha acusado a Iglesias de anteponer en sus prioridades que no haya “un gobierno socialista con un presidente socialista”.

En los últimos meses, ha señalado, los candidatos han aprendido mucho y, a su juicio, habrá “unos cuantos caminos que perpetúen a Rajoy, y solo uno que garantice el cambio, la papeleta del PSOE”.

España está ante una “encrucijada” después del “mal gobierno” de los últimos cuatro años, en que 3,5 millones de españoles han dejado de ser clase media y trabajadora. Ante los “desafíos” que existen, la actitud del PSOE es ver “grandes oportunidades”, frente a Rajoy, que “insufla miedo”, e Iglesias, que quiere “romper con todo”.

El PSOE, ha insistido, entendió el mensaje de los españoles de dejar atrás el “y tú más” y tiene que hablar de soluciones “y no tanto de sillas o sillones”, y ha señalado que pensaba que con Iglesias se podía entender pero ha resultado que no porque ya el 21 de diciembre habló “del derecho de autodeterminación y luego de la vicepresidencia”.

El próximo presidente del Gobierno será “un presidente votado por los españoles”, ha dicho el dirigente socialista, para añadir que tiene ganas de “poner fin a las injusticias”.

“No quiero que digan sí al PSOE ni por miedo ni por rencor, quiero que nos voten para hacer un país mejor”, ha proclamado el líder socialista, que ha prometido, si es elegido presidente del gobierno, derogar la reforma laboral, luchar contra el desempleo, recuperar la prestación para los parados mayores de 52 años, bajar el IVA cultural del 21 al 10 % y paralizar la LOMCE.

Además, ha avanzado que construirá un pacto educativo que garantice la universalidad de 0 a 18 años, que reconozca las becas como un derecho y congelará las tasas universitarias como ha hecho Ximo Puig en la Comunitat Valenciana.

Un acuerdo contra la violencia de género y una ley de igualdad salarial, la reforma de la Constitución en la que la sanidad sea un derecho y crear un “recargo solidario” para las grandes fortunas con el fin de una mejor financiación del sistema público de pensiones son algunas de las medidas que ha anunciado.

Sánchez ha citado en varias ocasiones en su intervención al president de la Generalitat, Ximo Puig, como cuando ha citado la recuperación de la sanidad universal y la gratuidad de los libros de texto, y ha señalado que los valencianos han puesto fin “a veinte años de un partido corrupto como el PP de Valencia”.

En el tema de refugiados, ha afirmado que España será un país de acogida de refugiados de Afganistán, Siria o Libia.

Antes de intervenir Sánchez, la consellera de Sanidad y secretaria de Igualdad del PSOE, Carmen Montón, ha afirmado que en el primer año de gobierno del PSPV y Compromís en la Comunitat Valenciana han demostrado que son “un gobierno decente que no deja a nadie atrás”.