El Senado de Nueva York aprueba una ambiciosa ley para enfrentar la crisis climática

El estado de Nueva York busca ser líder de la lucha contra la crisis climática tras aprobar el Senado estatal un plan para afrontar sus efectos cortando de forma drástica los gases de efecto invernadero, cambiando la dependencia de energía a fuentes renovables y creando “empleos verdes” para promover la justicia ambiental.

Entre las disposiciones de la Ley de Liderazgo Climático y de Protección Comunitaria, considerada la más amplia y agresiva legislación en la nación, y catalogada de “histórica”, se requiere que el estado reduzca su nivel de emisión de gases invernadero en un 85 % para 2050.

Igualmente exige tomar acción para reducir a cero las emisiones netas de gases contaminantes en todos los sectores de la economía.

El ambicioso proyecto, cuya meta es reducir al 100 % las emisiones de gases de efecto invernadero del sector eléctrico para 2040, fue aprobado por el Senado y se espera que la Cámara Baja lo ratifique este mismo miércoles, último día del periodo de sesiones del Congreso estatal, tras haber alcanzado un acuerdo con ese fin con el gobernador Andrew Cuomo.

El proyecto debe ser firmado por Cuomo para convertirse definitivamente en ley, lo que se espera pueda ocurrir de inmediato.

El periódico The New York Times, que había avanzado sobre el acuerdo, destacó que con este plan se crearía la llamada “economía neta cero”, el objetivo final de ambientalistas y otros expertos que buscan reducir el calentamiento global.

“Esto colocaría a Nueva York sin dudas en una posición de liderazgo global”, aseguró al Times Jesse Jenkins, un experto en energía de la Universidad de Harvard.

La presidenta del Senado, Andrea Stewart-Cousins, aseguró tras la votación de esa cámara que es “un día histórico para Nueva York en la lucha contra el cambio climático”.

Mientras que el autor del proyecto y presidente del Comité de Protección Ambiental, el senador Todd Kaminsky, indicó que “mientras Washington se duerme al volante, Nueva York está liderando el camino”.

“Este proyecto prácticamente elimina los gases efecto invernadero, fomentará la producción de energía renovable, creará empleos verdes, invertirá en comunidades de bajos recursos y protegerá nuestro planeta. Este es el momento para atrevidos cambios globales”, afirmó.

La aprobación de este proyecto se da en el momento en que la Administración del presidente Donald Trumo revocó el plan de su antecesor, Barack Obama, para reducir las emisiones de dióxido de carbono de centrales térmicas y forzar la transición hacia energías menos contaminantes.

La iniciativa, bautizada como “Energía Limpia Asequible”, fue anunciada por el director de la Agencia de Protección Medioambiental (EPA, en inglés), Andrew Wheeler, y se limita a incentivar la eficiencia de este tipo de centrales de generación eléctrica para facilitar su mayor longevidad y otorga a los estados discreción para determinar sus objetivos de emisiones.

Afirmó que con la normativa se pone fin a la “guerra al carbón” lanzada por Obama en 2015, que exigía reducir las emisiones de carbono de las centrales alimentadas con carbón un 32 % en 2030 respecto a los niveles de 2005 en EE.UU e instaba a las empresas de suministro eléctrico su adaptación hacia energías más limpias.

Pero, no había entrado en vigor porque estaba bloqueada por varios litigios judiciales.

El gobernador Cuomo salió este miércoles al paso de inmediato ante el Gobierno federal y aseguró que con esa acción “aumentarán las emisiones, la contaminación ambiental, las condiciones climatológicas extremas y pone en peligro la prometedora economía de energía limpia en detrimento de los estadounidenses”.

“Mientras la EPA de la Administración Trump pone nuestra economía, niños y el planeta en riesgo, Nueva York está liderando la nación logrando reales resultados con la Ley de Liderazgo Climático y de Protección Comunitaria”, concluyó.