Seúl descarta levantar las sanciones comerciales impuestas a Pyongyang en 2010

Corea del Sur anunció hoy que no levantará las sanciones comerciales que impuso al Norte hace hoy tres años y reclamó a su vecino el pago del primer plazo vencido de un préstamo que le brindó la pasada década a cambio de alimentos.

“Las sanciones tienen como objetivo dejar claro a Corea del Norte que se le hará pagar por las provocaciones y que Seúl las aplicó porque no tenía otra opción”, declaró el portavoz del Ministerio de Unificación de Corea del Sur, Kim Hyung-suk, en una rueda de prensa en Seúl.

Seúl anunció, el 24 de mayo de 2010, duras medidas que hasta hoy han restringido el comercio entre ambas Coreas, tras acusar a Pyongyang de hundir el buque surcoreano Cheonan en el Mar Amarillo dos meses antes, en un incidente que se saldó con 46 soldados muertos del Sur.

Las sanciones incluyen la prohibición de que barcos norcoreanos entren en aguas de Corea del Sur, la interrupción del comercio transfronterizo y el endurecimiento de la restricción de visitas de los surcoreanos al Norte.

Por otra parte, Kim Hyung-suk exigió públicamente a Corea del Norte que pague al Sur 5,8 millones de dólares correspondientes al primer plazo de un préstamo total de 724 millones de dólares en alimentos que le aportó la pasada década.

Para aliviar las hambrunas que sufría Corea del Norte desde los años 90, Seúl suministró al país vecino un total de 2,4 millones de toneladas de arroz y 200.000 toneladas de maíz entre 2000 y 2007, lo que compromete al Norte a pagar hasta el año 2037 un total de 875,32 millones de dólares, intereses incluidos.

En su intervención, Kim Hyung-suk no se pronunció, sin embargo, sobre las declaraciones de un enviado especial de Corea del Norte a China, que subrayó ayer la voluntad del régimen de retomar el diálogo con los países implicados en lograr la desnuclearización de la península coreana.

En este sentido, una portavoz del Ministerio comentó a Efe que “todavía es pronto” para que Seúl ofrezca una valoración sobre la aparente voluntad de diálogo de Corea del Norte tras varios meses de tensión.