Solana dice que, además de acoger a los refugiados, hay que parar la guerra en Siria, aunque no con la OTAN

Durante un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Forum, en el que ha presentado al expresidente de la Eurocámara Josep Borrell, Solana ha insistido en que esa guerra, que ha provocado ya que la mitad de los sirios “se ha desplazado o ha muerto”, tiene que parar. Pero ha recalcado que la comunidad internacional sólo puede “ayudar” a los sunitas moderados, que son los que tienen que imponerse a los radicales.

El ex secretario general de la OTAN ha sido contundente al afirmar que esta organización no debe intervenir, porque si lo hiciera sería “la vuelta a las cruzadas” y no se resolvería el problema de fondo. “Deben resolverlo los sunitas moderados, nosotros les podemos ayudar, pero si queremos liderarlo no resolveremos jamás el problema”, ha recalcado.

“SI NO HUBIÉRAMOS HECHO ALGUNA COSA EN IRAK...”

Eso sí, ha insistido en la necesidad de que la comunidad internacional trate de “solucionar” esta crisis, porque tiene “una responsabilidad”. En concreto, ha señalado que la situación en Siria es causa de “algunas acciones” que ha hecho el mundo occidental.

“Si no hubiéramos hecho alguna cosa en Libia, pues igual no estaríamos donde estamos; si no hubiéramos hecho alguna cosa en Irak, a lo mejor no estábamos donde estamos... Pero estamos, y tenemos una responsabilidad que solucionar”, ha remachado.

Por lo que se refiere a la gestión de la crisis de los refugiados, Solana ha apuntado que las instituciones comunitarias “están respondiendo bien”, pero los Estados miembros no “suficientemente”.

En concreto, ha denunciado la “mezquindad” de incluir la religión de los refugiados como criterio para acogerlos y ha criticado que, después de que el Papa animara a todas las parroquias europeas a acoger a familias, el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, dijera que no va a acoger “a nadie que no sea cristiano”.

“No quiero hablar más Hungría porque me pongo malo”, ha reconocido Solana, que ha asegurado que este tema la “crispa”. “Yo fue quien dio la entrada a Hungría, entre otros”, ha recordado.

Además, ha recalcado que la necesidad de responder a esta crisis no viene sólo de una “convicción europea”, sino de las convenciones internacionales y, en concreto, la de Naciones Unidas, que se creó precisamente “para proteger a ciudadanos europeos refugiados”.

“Por tanto, una respuesta positiva tenemos que dar, esto no va a ser fácil, no hay duda de que no es fácil, pero no lo tenemos que hacer tan difícil”, ha remachado.