Sorpresa e incredulidad en Jerte por el encierro de seis años de un vecino

Los habitantes del municipio de Jerte (Cáceres) han acogido con sorpresa e incredulidad la historia de su vecino Alberto J.N., un hombre de 48 años que ha permanecido encerrado en una vivienda de la localidad durante los últimos seis años por miedo a entrar a prisión.

Alberto, natural de Tornavacas (Cáceres), ha sido detenido este martes por la Guardia Civil al estar reclamado por el Juzgado de Instrucción número 3 de Salamanca como supuesto autor de un delito contra el patrimonio.

Alberto, que ha atendido a Efe en su casa, donde estaba acompañado de su pareja, ha explicado que, tras cumplir una pena por maltrato en la prisión de Salamanca, tener otra causa pendiente y vivir más de un año en la calle, decidió volver a su tierra para “esconderse”.

Desde hace seis años no ha abandonado su vieja, desangelada y humilde casa, ubicada en la calle Ramón Cepeda, de Jerte ante el temor de que dicha causa pendiente le condujera a cumplir pena de prisión.

Alberto ha relatado que su encierro ha sido tal que no ha acudido al entierro de su padre, fallecido recientemente, o que incluso ha llegado a extraerse él mismo dos piezas dentales de la boca con un alicate.

Tras declararse inocente “de todo”, se ha mostrado “muy sorprendido” por el revuelo que su historia ha causado en la población y ha manifestado que lo único que quiere “es encontrar un trabajo y olvidarse de todo esto”.

Algunos de sus vecinos, como es el caso de Antonia, han asegurado a Efe que desconocían por completo que estuviera viviendo en el pueblo y mucho menos que no haya salido de casa durante tanto tiempo.

“Nosotros nos hemos enterado hoy mismo porque lo ha comentado la gente”, ha destacado.

“Nos ha sorprendido, pero nos da mucha pena que lo hayan cogido y que haya estado escondido tantos años, porque no ha hecho nada para estar en esta situación. Es un tío que no se ha metido con nadie y lo único es la historia que tiene detrás con problemas de alcohol y drogas”, ha afirmado Mercedes, otra vecina de Jerte.

Algunos vecinos también han asegurado que había personas que sí sabían que Alberto se ocultaba de la Justicia en Jerte.