Sudán del Sur aprueba oficialmente el despliegue de cascos azules en Yuba

Sudán del Sur aprobó hoy el despliegue adicional de fuerzas internacionales de la ONU en el país, después del rebrote de la violencia entre las tropas del Gobierno y de la oposición armada el pasado verano.

El viceministro de Información, Akol Paul Kordit, declaró a Efe que “el país ya está listo para recibir a las fuerzas” de paz y que “el Gobierno de transición de Sudán del Sur da la bienvenida al despliegue de las fuerzas de la ONU en cualquier momento”.

El Ejecutivo sursudanés dio luz verde a ese despliegue el pasado 4 de septiembre, pero dijo que tenía que negociar con la ONU las condiciones del mismo, lugares de presencia en la capital y preparativos logísticos, lo cual hizo temer que Yuba rechazara en última instancia la llegada de más fuerzas de paz.

Kordit afirmó hoy que “ya están finalizados los arreglos necesarios entre el Gobierno y la misión de la ONU para el despliegue de estas fuerzas”.

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó en agosto el despliegue de una fuerza regional de 4.000 soldados adicionales, para garantizar la seguridad e impedir ataques contra las sedes del organismo en la capital, Yuba.

La resolución fue adoptada tras los choques entre las tropas del presidente, Salva Kiir, y las del líder opositor y exvicepresidente, Riek Machar, que causaron en julio pasado al menos 300 muertos y el desplazamiento de miles de personas en Yuba.

La misión de la ONU en Sudán del Sur está compuesta por 13.000 soldados, que pasarán a ser 17.000, los cuales pueden utilizar “todos los medios necesarios” para proteger al personal de Naciones Unidas, así como tomar acciones “proactivas” para velar por la seguridad de los civiles.