Testigos vieron al español descuartizado en Bangkok acompañado de un extranjero

Trabajadores del edificio donde residía el español que fue descuartizado en Bangkok en enero pasado declararon hoy que, la última noche que se le vio con vida, la víctima llegó al apartamento con un extranjero y poco después ambos se marcharon juntos.

Las declaraciones se produjeron en el juicio a Artur Segarra, el único acusado del asesinato del consultor español David Bernat, al que el pasado 19 de enero fue la última vez que se le vio con vida.

Uno de los testigos, un técnico del inmueble, no identificó a Segarra como el acompañante porque no recordaba muy bien al extranjero, pero lo describió como un hombre de piel morena, delgado y un poco más alto que Bernat.

La descripción del trabajador no descarta a Segarra, quien mantiene su inocencia de los trece cargos que se le imputan, entre ellos asesinato premeditado, que se castiga con la pena de muerte.

El testigo recordó que ese mismo día subió al piso de Bernat porque un vecino le avisó de que se había dejado la llave puesta en la cerradura de la puerta de entrada.

El testigo indicó que no entró en el apartamento y que no le dio importancia al hecho de la llave olvidada porque Bernat era, en su opinión, un tanto despistado.

Un guardia de seguridad del mismo edificio corroboró hoy la declaración de su compañero y tampoco pudo identificar al acompañante cuando Bernat abandonó con el extranjero el inmueble en una motocicleta.

Segarra se quejó hoy de que la fiscalía guiaba las declaraciones de los testigos.

Bernat llegó a la capital tailandesa el 19 de enero de 2016 procedente de Teherán, donde mantenía negocios y residía de manera habitual.

Un amigo cercano a Bernat relató en una vista anterior de este juicio que fue a visitarle a finales de enero porque le había extrañado su comportamiento errático cuando se intercambiaban mensajes de texto y explicó que al llegar al apartamento le pareció que la víctima llevaba días sin aparecer por ahí.

Las primeras partes del cadáver descuartizado de Bernat aparecieron el 30 de enero en el río Chao Phraya, que cruza Bangkok.

El 4 de febrero, la policía confirmó que el ADN de los restos humanos hallados en el río coincidían con muestras de Bernat, y al día siguiente acusó a Segarra como el principal sospechoso de un caso de secuestro con pretensión de extorsión y robo, y que acabó con asesinato.

El 7 de febrero, Segarra fue detenido en el sur de Camboya, adonde había huido desde Tailandia, y entregado, al día siguiente, a las autoridades tailandesas.

Las vistas orales del juicio comenzaron el 1 de diciembre pasado, y ese mismo día un policía que participó en la investigación declaró como testigo que tienen numerosas pruebas y grabaciones de cámaras de seguridad que señalan a Segarra como único autor del asesinato de Bernat para robarle.

Según los alegatos de la hermana de Bernat y un amigo de la víctima durante las vistas, alguien suplantó la identidad del muerto para desbloquear una transferencia bancaria mediante aplicaciones de mensajería y en un correo electrónico que se hicieron después del 30 de enero.

Estos trámites estaban escritos en catalán, idioma que hablaban la víctima y el acusado, y en inglés “básico”, lo que resultaba extraño porque Bernat lo dominaba al haber estudiado en Estados Unidos.

El juicio contra Segarra continuará de forma intermitente hasta el 16 de marzo de 2017, según los últimos cambios.