Turquía cancelará los acuerdos migratorios con la UE si ésta mantiene el visado

Ankara ha advertido a la Unión Europea (UE) de que cancelará los acuerdos por los que Turquía se ha comprometido a aceptar a inmigrantes indocumentados devueltos desde un país comunitario si Bruselas no levanta la obligatoriedad del visado para los ciudadanos turcos, informó hoy el diario Hürriyet.

“No es broma, realmente cancelaremos el acuerdo”, dijo el ministro turco de Asuntos Europeos, Volkan Bozkir, en una reunión con representantes de la Asociación de Mujeres Empresarias de Turquía (TIKAD) celebrada anoche en Estambul.

Ankara y Bruselas firmaron en diciembre de 2013 un acuerdo por el que Turquía se compromete a aceptar a los emigrantes de terceros países que entran ilegalmente en un Estado miembro de la UE desde Turquía, acuerdo que fue ratificado en junio pasado por el Parlamento turco.

El pleno cumplimiento de este acuerdo, ratificado en junio pasado por el Parlamento, es un requisito esencial de la UE para permitir que los turcos puedan entrar en territorio comunitario sin visado.

“Para nosotros es muy importante abolir los visados; también es importante el Acuerdo de Devolución. Por eso digo: si no se elimina el visado, cancelaremos el acuerdo”, insistió Bozkir.

“¿Por qué no eliminan el visado?. Dicen: 'Si abrimos las puertas, el primer día llegarán diez millones, luego cinco millones, luego 25 millones de turcos a Europa. Invadirán el mercado europeo'”, dijo el ministro aludiendo a la postura de la UE en este asunto.

“Existe este miedo, pero si fuéramos ¿qué haríamos allí?. No hay trabajo”, abundó Bozkir.

“Otro motivo es que las tarifas de visado son una importante fuente de ingresos para los consulados. Pero espero que se elimine. Estamos en proceso de negociación; parece ir lento pero no va tan lento”, agregó Bozkir.

Los complicados procedimientos burocráticos para conseguir un visado a un país del espacio Schengen son motivo de queja para un amplio sector turco de clase media que no tiene intención alguna de emigrar pero sí de hacer una visita turística o bien acudir a una reunión de trabajo en una empresa internacional.

Incluso empresarios españoles afincados en Estambul confiaron a Efe estar “desesperados” ante la dificultad de enviar a empleados turcos a España para participar en congresos, talleres o actividades formativas.