Unicef alerta que la escalada de la violencia en Yemen lleva al caos

La directora ejecutiva de Unicef, Henrietta Fore, afirmó hoy que “la intensificación de la violencia en Al Hudeida supone otro golpe más para los esfuerzos de paz en Yemen, un país que se dirige cada vez más hacia el caos y la miseria”, y pone en riego la vida de miles de niños.

La escalada de las hostilidades está poniendo a miles de niños que viven dentro y en los alrededores de la zona en un riesgo inminente de sufrir lesiones o la muerte, ha advertido en un comunicado esta agencia de la ONU, que avisa que los ataques aéreos y los combates terrestres también podrían causar nuevas olas de desplazamientos e interrupciones en el suministro del agua potable.

Dado que el acceso a los bienes y servicios esenciales ya es muy limitado en gran parte de Yemen, el impacto de una mayor violencia podría ser “catastrófico”, según Fore, ya que el puerto de Hodeida es un punto crítico de entrada para los suministros humanitarios, los combustibles y los bienes comerciales, de los que depende la supervivencia de la mayor parte del país.

“El mundo ha emitido llamamientos fuertes y claros para que se salve el puerto. Estos llamamientos deben acatarse. Las vidas de decenas de miles de niños están en juego”, advierten desde Unicef, desde se asegura que “no es demasiado tarde para volver a la mesa de negociaciones y respaldar los esfuerzos de paz del Enviado Especial de la ONU”.

Al menos 6.500 niños han muerto o han resultado heridos en Yemen desde que el conflicto se intensificó hace tres años, según la Unicef, que cree que “solo la paz puede poner fin a este derramamiento de sangre y, hasta que llegue, pedimos a las partes que muestren el máximo respeto por la vida humana y permitan el acceso humanitario”.

El Ejército yemení anunció ayer el lanzamiento de una gran ofensiva para conquistar Al Hudeida en la noche del lunes, pero desde entonces las posiciones se han mantenido sin cambios.

Las fuerzas gubernamentales yemeníes, con la cobertura de la coalición árabe, lanzaron su primera ofensiva contra Al Hudeida en junio pasado, pero se detuvieron después de tomar el aeropuerto, en el sur de la urbe, para permitir la celebración de unas negociaciones que han acabado fracasando.

La reanudación de la ofensiva se ha producido tras el fracaso de las conversaciones de paz entre el Gobierno yemení y los rebeldes en Ginebra hace dos semanas.