Víctimas critican la “equidistancia” de PNV y PSE y recuerdan que es ETA quien se tiene que disolver

Las asociaciones de víctimas han criticado este lunes de forma unánime el pacto alcanzado entre el PNV y el PSE al entender que ambas organizaciones vuelven a la “equidistancia” entre víctimas y terroristas de ETA, de quienes sólo esperan que se disuelvan como banda y colaboren con la Justicia.

El pacto alcanzado entre el PNV y el PSE prevé una propuesta para el desarme definitivo de ETA, con una declaración previa de la banda sobre su carácter “irreversible e incondicional”, así como el compromiso con una política penitenciaria que incluya tanto “el reconocimiento del daño causado” como el acercamiento de los presos de la banda.

“No entendemos por qué se meten en estos charcos estos artistas del manejo del lenguaje y de la ambigüedad”, ha explicado a Europa Press el presidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Alfonso Sánchez, molesto por esta vuelta al relato que “blanquea” la historia de más de cuarenta años de atentados, con más de 800 asesinados y más de 300 casos sin autor conocido.

La AVT ha mostrado su deseo de que el nuevo ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, no ceda a las peticiones del PNV y el PSE para que se transfieran las competencias de prisiones, “al menos no mientras los terroristas no colaboren activamente con la Justicia”.

Sánchez rechaza igualmente que se equipare a víctimas de ETA con víctimas de la Policía. “No es comparable y no se puede mezclar porque, al margen de los GAL y episodios puntuales ya juzgados, ellos seguían una estrategia criminal contra el Estado”, ha defendido el representante de la AVT, que ha apelado a la memoria de socialistas asesinados como Ernest Lluch.

Desde Covite, su presidenta, Consuelo Ordóñez, también ha rechazado que el PNV y el PSE se erijan en interlocutores del fin de la violencia, algo que es competencias de las fuerzas de seguridad. “Igual que ETA no necesitó la ayuda de los partidos políticos para armarse, tampoco la necesita para abandonar las armas”, ha apostillado.

“De ETA”, ha añadido en declaraciones a Europa Press, “no esperamos palabras porque, de hecho, lo que queremos es que no tengan ni siquiera capacidad para emitir un comunicado y que, si lo escriben, lo hagan desde prisión”. Ordóñez añade que está en sus manos revertir su situación en las cárceles si dejan de obedecer la disciplina de la dirección de la banda.

PNV: “PELIGRO” PARA DESLEGITIMAR A ETA

Todas las organizaciones, además, han criticado la reunión este fin de semana entre los líderes del PSE, Idoia Mendia, y EH Bildu, Arnaldo Otegi. “No debería ser interlocutor de ningún partido democrático porque a día de hoy sigue justificando la trayectoria de ETA”, reprochan por ejemplo desde Covite.

Aparte de cuestionar que se “fomente el blanqueamiento de la historia criminal de la banda”, Consuelo Ordóñez --hermana de Gregorio Ordóñez, dirigente del PP asesinado por ETA-- ha cuestionado que el PNV ahora pida la competencia de prisiones cuando “durante décadas rechazó ser el carcelero” de los terroristas.

Ordóñez mantiene su crítica hacia los nacionalistas vascos por permitir homenajes públicos a terroristas y autorizar jornadas en contra de las fuerzas de seguridad. “Hoy el PNV es el mayor peligro para deslegitimar el terrorismo”, sostiene Consuelo Ordóñez.

El presidente de Dignidad y Justicia, Daniel Portero, se dirige directamente a la gestora del PSOE para que “reflexione” sobre el contenido del acuerdo del PSE y el PNV. “Con la tibieza no se va a ningún sitio”, señala Portero, quien critica especialmente que se dé crédito a las “falsas torturas” en lo que considera una vuelta a la “equidistancia” de tiempos del lehendakari Juan José Ibarretxe.