Zoido envía una carta a los agentes: No estás solo, te respalda todo un país

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha remitido una carta a todos los policías y guardias civiles para expresarles su apoyo, recordarles que no están solos y asegurarles que todo un país les respalda por su profesionalidad y por proteger los derechos y libertades de los españoles.

Una misiva de la que hoy ha informado el Ministerio del Interior y que, además de por los acontecimientos del 1-O, les remite con motivo de la celebración este mes de los patronos de la Policía Nacional (los Ángeles Custodios el 2 de octubre) y la patrona de la Guardia Civil (la Virgen del Pilar el 12 de octubre).

“Actuaremos con toda la celeridad y contundencia que nos permita la Ley para que quien te menosprecie o atente contra tu dignidad pague por ello”, les dice Zoido a los agentes después del acoso que están sufriendo en Cataluña por parte de independentistas.

“A ti, que vistes con honor el uniforme que siempre deseaste llevar desde niño. A ti, que ahora estás lejos de los tuyos cumpliendo con tu deber porque te lo reclama tu bendita vocación. Y también a ti, que aunque estás en casa o en el lugar que un día te acogió, ahora te rodea un ambiente hostil. A ti quiero decirte que no estás solo y que tu profesionalidad, compromiso y lealtad son un ejemplo que llena de orgullo a todos los españoles”, dice la misiva.

En la carta, el ministro del Interior escribe que los agentes no pueden estar solos porque todos les respetan y admiran, porque están en Cataluña tan sólo haciendo su trabajo, que realizan “con la calidad y cariño” que les caracterizan,

Les recuerda que son ellos los que garantizan el cumplimiento de la Ley, los que protegen las libertades y derechos de todos los españoles y quienes hacen posible que se respete aquello que determina la Constitución y el Estado de Derecho.

“Porque sin Ley ni orden no puede haber democracia y sin democracia los españoles decidimos hace ya mucho tiempo que no queremos vivir”, añade.

Zoido les asegura que el Gobierno de España y los mandos policiales tienen “la firme y férrea voluntad de impedir” que los agentes de ambos cuerpos sufran insultos, amenazas, agresiones o acoso “provocados por el odio inoculado por quienes han perdido la razón en una peligrosa deriva”.

De ese modo, afirma que actuarán con toda la celeridad y contundencia que permita la ley para que quien les menosprecie o atente contra su dignidad pague por ello.