Bolsonaro avisa que puede vetar fondo para campañas de elecciones municipales

El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, advirtió este jueves que puede vetar un fondo de 2.000 millones de reales (unos 500 millones de dólares) aprobado por el Congreso para financiar las campañas para las elecciones municipales de 2020.

“Si hay una brecha para vetarlo, lo voy a hacer. Porque no veo, con todo respeto, que sea justo reservar esos recursos para hacer campañas”, declaró el mandatario a los periodistas a las puertas del Palacio de la Alvorada, su residencia oficial en Brasilia.

El llamado Fondo Especial de Financiación de Campañas consta, por ley, en los presupuestos del Estado para 2020, aprobados esta semana por el Parlamento, y el valor fue sugerido por el propio Gobierno, pese a que Bolsonaro está en contra de que los partidos políticos sean financiados con recursos públicos.

“Esa propuesta fue en función de una ley”, aprobada en 2017, al calor de sonados escándalos de corrupción derivados de los aportes de la empresa privada a las campañas electorales, explicó Bolsonaro, quien siempre se manifestó contrario a esa iniciativa.

Según el gobernante, el dinero público destinado a los partidos “difícilmente va para un candidato joven” que aspira a renovar la política y “solamente sirve para mantener a quien ya está”, por lo que los técnicos del Gobierno analizarán el asunto para determinar si es posible vetar ese fondo.

“No quiero enfrentar al Parlamento, pero, por el amor de Dios, si le damos esos 2.000 millones al Ministerio de Infraestructura van a ver lo que se puede hacer por Brasil”, apuntó.

Los recursos, según la ley en vigor, deben ser distribuidos en forma proporcional entre los partidos políticos con representación parlamentaria y, en este caso, ayudar a financiar las campañas para las elecciones municipales previstas para octubre próximo.

Bolsonaro acaba de abandonar el Partido Social Liberal (PSL), que en 2018 usó como plataforma para llegar al poder, y pretende fundar su propia formación conservadora, que ya ha bautizado como Alianza por Brasil (APB).

Para constituirse como partido político oficial, la APB deberá presentar ante la justicia electoral un mínimo de 500.000 firmas de personas que la apoyan.

El proceso de recolección de firmas comenzó esta misma semana, pero el propio Bolsonaro duda de que todo el trámite para reconocer a la APB como partido concluya antes de marzo próximo, que marca el plazo para la presentación de candidatos a las municipales.

De ese modo, la APB no podría tener candidatos propios para esos comicios ni podría optar a obtener recursos del Fondo Especial de Financiación de Campañas que el gobernante se propone vetar.