Budó dice que la delegación catalana de la Mesa pedirá reconocer las partes en conflicto, incluido “prisión y exilio”

La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha asegurado este martes que la delegación catalana de la Mesa de diálogo con el gobierno de Pedro Sánchez pedirá el “reconocimiento de todas las partes en conflicto”, incluido “prisión y exilio”.

Budó ha hecho esta afirmación después de que JxCat haya reiterado que el Gobierno debe reconocer a Puigdemont. Asimismo ha defendido que la delegación de la Generalitat que asistirá a la mesa de diálogo, que incluye a dirigentes de JxCat y ERC que no forman parte del Govern, es la “más efectiva” para encarar esta negociación con el Gobierno. Ha indicado también que no hay un orden del día consensuado para la reunión y que insistirán en el mediador.

Lo ha dicho en la rueda de prensa posterior al Consell Executiu, después de que el Govern haya aprobado los nombramientos de esa delegación, que estará encabezada por el presidente, Quim Torra, y el vicepresidente, Pere Aragonès, y los acompañarán los consellers Jordi Puigneró y Alfred Bosch, los diputados Elsa Artadi, Marta Vilalta y Josep Maria Jové, y el exjefe de gabinete de Torra y Carles Puigdemont, Josep Rius.

Budó ha afirmado que la decisión de incluir a personas externas al Govern ha sido fruto de un acuerdo entre Torra y Aragonès, y que han concluido que “esta es la composición que puede ir mejor para la parte catalana”, en respuesta a los periodistas que le han preguntados por los motivos sobre incluir a miembros externos al Ejecutivo catalán para una mesa de negociación que se había acordado que sería entre gobiernos.

“El presidente y el vicepresidente han decidido cuál es la composición más efectiva para encarar el diálogo. Para nosotros, máxima confianza en estos representantes”, y ha negado que el hecho de que haya personas que no están en el Govern cambie nada ni hace que deje de ser una mesa entre gobiernos, según ella.

La portavoz del Ejecutivo catalán ha sostenido que Torra y Aragonès han “querido abrir el abanico de participantes y que vaya más allá de los miembros del Govern e incluir a otros actores con los que esta negociación puede ir mejor”, ya que cree que también garantiza la máxima pluralidad y representatividad de los partidos.

Asimismo, ha subrayado que esta delegación irá a negociar con el Gobierno desde la unidad de acción, pese a las últimas discrepancias entre JxCat y ERC: “Vamos conjuntamente a negociar una resolución al conflicto político. No vamos a hacer dos negociaciones en paralelo”.

SIN ORDEN DEL DÍA

Preguntada por si han consensuado un orden del día para la reunión de este miércoles, ha contestado que todavía no hay un acuerdo en este sentido, pero que aún hay tiempo hasta el miércoles por la tarde para trabajarlo.

Ha asegurado que por parte de la delegación catalana el orden del día será llevar el ejercicio del derecho a la autodeterminación, la amnistía y también insistirá en la necesidad de incluir un mediador como garantía para este diálogo.

La figura del mediador es uno de los puntos de discrepancia entre JxCat y ERC: la formación de Puigdemont y Torra ha defendido en las últimas semanas que es imprescindible que haya un mediador internacional para comenzar a reunir a la mesa y para que el diálogo tenga garantías, mientras que los republicanos argumentan que lo importante es que comience la negociación y que el relator no puede ser un obstáculo si el Gobierno lo rechaza.

Finalmente, la mesa se reunirá sin haber acordado previamente las garantías del cumplimiento de los pactos, pero con el acuerdo de que se abordarán una vez comiencen las reuniones entre ejecutivos y con el aviso de Budó de que el mediador se planteará en ella.

Al ser preguntada por qué harán si el Ejecutivo de Pedro Sánchez se niega a aceptar esta figura, Budó ha pedido no avanzar escenarios y que ya se verá cómo va la reunión del miércoles.

Budó ha añadido que la voluntad del Govern es que esta mesa sirva para encontrar una solución al conflicto y espera que el Gobierno vaya con esa misma voluntad, aunque reconoce que la resolución no llegará en la primera reunión: “Por parte del Govern hay la máxima voluntad para que este diálogo sea efectivo, esperamos que por parte del Estado haya la misma voluntad de diálogo”.