Buteflika inaugura una sección de la Gran Mezquita de Argel

El presidente de Argelia, Abdelaziz Buteflika, visitó hoy las obras de la Gran Mezquita de Argel, un proyecto por valor de más de mil millones de euros (1.196 millones de dólares) que aspira a ser uno de los mayores templos islámicos del mundo y con el minarete más alto de África, de 2190 metros.

Sentado en una silla de ruedas y sin hablar desde que en 2013 sufriera un accidente cardiovascular grave que ha minado sus facultades físicas, el mandatario inauguró la gran sala de oración, informó la prensa local.

La sala tiene una dimensión de 20.000 metros cuadrados, está precedida por una gran explanada que permite la reunión de más de 100.000 fieles y rematada por una gran cúpula dorada que aún construye la compañía china encargada de un proyecto que ha recibido grandes críticas por su sobrecoste en un país en crisis económica.

Las autoridades argelinas calculan que la gran mezquita, que pretende empequeñecer a la de Hasan II en Marruecos, estará concluida a final de este año, después de que haya acumulado meses de retrasos.

Antes de la visita a la mezquita, Buteflika, que apenas prodiga sus apariciones en público, viajó a la localidad de Tixrain, en las afueras de Argel, donde también visitó una mezquita perteneciente a la gran cofradía sufí “Al Bekaidia”, de una gran tradición en Argelia.

En las imágenes difundidas por la televisión local Ennahar, se pudo ver al hermano del mandatario, Said, al que se cita como posible sucesor, empujando la silla de ruedas del presidente, a quien acompaña en cada acto.

El último acto público de Buteflika se remontaba al pasado 10 de abril, fecha en la que procedió a la reapertura de la mezquita Ketchoua, en el centro de Argel, y a la inauguración de la ampliación de la línea del metro en la capital del país.

Buteflika sufrió en 2013 un accidente cardiovascular y desde entonces sus apariciones públicas son poco frecuentes, reducidas a las imágenes retransmitidas por la cadena estatal con motivo de un consejo de ministros o de visitas de altos responsables extranjeros.