Cospedal, sobre el caso Bárcenas: “Que se ventile cuanto antes”
María Dolores de Cospedal ha intentado quitar hierro al hecho de que varios dirigentes del PP tengan que testificar ante el juez Pablo Ruz por el caso Bárcenas. Pocas horas antes de que una comisión judicial se presente en el Senado para tomar declaración al presidente de la cámara, Pío García Escudero, como testigo en el caso Bárcenas, la secretaria general del PP se ha referido al asunto de forma despreocupada y ha deseado que “se ventile con toda normalidad”.
García Escudero reconoció haber cobrado del extesorero cinco millones de pesetas para reformar su vivienda por los destrozos de un atentado nada más publicarse en El País que figuraba como perceptor de dinero en los papeles de Bárcenas. De hecho, la confesión del presidente del Senado descolocó a Cospedal, que no sabía nada del asunto y entonces sólo dijo “el sabrá”. Además de García Escudero, testificarán también ante el juez Ruz Eugenio Nasarre y Santiago Abascal.
La publicación de los papeles de Bárcenas provocó que IU y otras asociaciones se querellaran contra el PP por varios delitos, entre ellos, el de financiación ilegal. Eso provocó el inmediato anuncio de Cospedal de otra querella como contraataque. Tres meses después, el PP aún no la ha presentado en el juzgado.
Según ha explicado Cospedal a eldiario.es, los abogados del PP se vieron con los de IU aunque no ha sabido decir cuándo tuvo lugar esa reunión. La secretaria general asegura que no fue posible llegar a ningún tipo de acuerdo, por lo que ha insistido esta mañana en que la acción judicial seguirá adelante aunque aún no tiene fecha de presentación. “De dejarlo estar, nada”, ha afirmado. La información ha supuesto una sorpresa para IU, que desmiente que sus servicios jurídicos hayan tenido algún tipo de encuentro con los conservadores así como haber recibido peticiones en este sentido. Precisan, además, que estas querellas no pasan por actos de conciliación.
Reunión para calmar a los barones
El próximo lunes, Mariano Rajoy reunirá a todos sus barones en la sede de la calle Génova para calmar el ambiente reivindicativo sobre los próximos objetivos de déficit. Cospedal también ha querido rebajar las expectativas sobre la cita, “hablarán de todo”, pero ha vuelto a dejar claro que no permitirá que los acuerdos sean bilaterales “ni que haya componendas” de forma que las comunidades cumplidoras salgan perjudicadas. “¡Estaría bueno!, ha exclamado.
Igual de resuelta se la ha visto a la hora de defender el proyecto de la LOMCE de José Ignacio Wert. Preguntada por el sentido de que la religión vuelva a puntuar en las evaluaciones y su utilidad contra el problema del fracaso escolar, Cospedal ha argumentado que cuando un alumno opta por una materia, tiene que “estudiarla”. De esta forma, el Gobierno ha satisfecho na vieja reivindicación de la Conferencia Episcopal, que intenta reforzar el peso de la asignatura en los boletines de notas. Cospedal ha dicho no entender las críticas, ya que se concede “libertad de opción”.
