El voto de confianza al primer ministro de Túnez alargado hasta la noche

La votación de confianza en el Parlamento de Túnez al primer ministro del país, Habib Essi, se prolongará hasta esta noche debido al gran número de diputados que han pedido intervenir, dijo el presidente del legislativo tunecino, Mohamed Naserm.

Por su parte en su intervención en el pleno Essid afirmó que pidió presentarse ante el parlamento por respeto a la Constitución y la democracia y “dar una buena imagen” del país.

El jefe del Ejecutivo recordó las circunstancias por las que fue elegido para el cargo en enero de 2015 en especial “por el miedo a la hegemonía política”.

Asímismo añadió que su gobierno tenía como objetivos luchar contra el terrorismo, el alza de los precios y la instauración de la paz social.

“Todos los objetivos han sido realizados. Además acepté esta misión porque creí que el gobierno debía permanecer porque Túnez necesitaba esa estabilidad”, señaló.

Naserm reconoció que la situación económica “es difícil” pero “no insuperable” y tras precisar que su gobierno llegó a reducir el alza de los precios de un 5,7% en febrero de 2015 a un 3,9% en la actualidad.

A juicio del jefe del Ejecutivo la situación “no permite incertidumbres”, por lo que insistió en la necesidad de “continuidad y estabilidad” para la economía y la imagen exterior del país.

En referencia a la lucha contra la corrupción y el problema del desempleo, principales reivindicaciones de las revueltas sociales de 2011, expresó que no pueden solucionarse en el periodo de un año “con un cambio de gobierno”.

En esta sesión, 186 diputados debaten sobre la pertinencia de cambiar el Gobierno para dar paso a la creación de otro Ejecutivo de unidad nacional propuesto por el jefe del Estado, Beyi Caid Essebsi, el pasado 2 de junio.

El primer ministro prefirió someterse al voto de confianza parlamentario antes que presentar su dimisión, a lo que se ha negado hasta en tres ocasiones durante las últimas dos semanas, lo que ha prolongado la crisis institucional.

Essid deberá obtener hoy el voto favorable de al menos 109 diputados para permanecer en el cargo.

Los principales partidos políticos ya anunciaron en los últimos días su negativa a renovar en el cargo al primer ministro, así como su predisposición a apoyar a un gobierno de unidad nacional cuya hoja de ruta fue pactada y firmada el pasado 13 de julio.

Se trata del movimiento islamista de Al Nahda, el partido de centro derecha “Nida-Tunis”, los populistas de Unión Patriótica Libre (UPL) y los socialdemócratas de Afek-Tunis.

La coalición compuesta por una docena de partidos de izquierdas del Frente Popular (FP) han sido los únicos que no apoyan las iniciativas del presidente tunecino por lo que su participación en el futuro gobierno está descartada.

Túnez atraviesa además una crisis económica y social agravada por la caída del sector turístico, principal proveedor de divisas, después de los tres atentados yihadistas del pasado año que causaron unos sesenta muertos, en su mayoría extranjeros.