El coodinador antiterrorista de la UE dice que hay que crear un nuevo concepto de seguridad europea

El coordinador antiterrorista de la Unión Europea (UE), Gilles de Kerchove, planteó hoy la necesidad de establecer “un concepto de seguridad europea” para hacer frente “al desafío global e internacional” de la lucha contra el terrorismo, aunque incidió en que esta tarea “llevará tiempo”.

“Hay que plantearse la necesidad de establecer un concepto de seguridad europeo, porque estamos ante un desafío global, internacional, pero, nos guste o no, la seguridad sigue siendo una competencia exclusiva y soberana de los Estados y esto llevará tiempo”, afirmó De Kerchove.

En respuesta a las preguntas de los eurodiputados de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia e Interior de la Eurocámara, De Kerchove dijo que “una mayor credibilidad europea incrementará las posibilidades de éxito frente al reto de combatir el terrorismo”.

“Estamos lejos de tener un FBI europeo, pero hay que encontrar el equilibrio y fomentar un mayor intercambio de información entre Estados miembros, con un marco firme para la protección de datos que no suponga una traba”, dijo.

De Kerchove hizo hincapié en la prevención contra el terrorismo, con medidas que permitan “atajar la radicalización”, desde Internet hasta los programas de rehabilitación de los combatientes extranjeros radicalizados.

“Necesitamos opciones alternativas al proceso penal y a las cárceles, hay que impulsar los programas de rehabilitación para luchar contra la radicalización de los combatientes extranjeros”, afirmó.

De Kerchove incidió en que la UE debe “recabar toda la información posible para impulsar una lucha eficaz contra el terrorismo”, para lo que son necesarios “el intercambio y la cooperación” entre los Estados miembros.

“Aunque celebramos los cambios para mejor, tenemos que reconocer que hace falta más cooperación, tanto en el control de fronteras como en la garantía de la seguridad”, añadió.

Un trabajo que, según De Kerchove, debe impulsarse en las fronteras “en los centros de identificación” de refugiados y solicitantes de asilo, donde pidió “más funcionarios de Europol” que cuenten con “instrumentos adecuados”.

Entre otros, hizo referencia a la necesidad de conexiones electrónicas o el uso de dispositivos de lectura de pasaportes.

“Sabemos que hay limitaciones y restricciones, pero queremos trabajar en estos ámbitos”, dijo, al tiempo que insistió en que “garantizar Schengen es un logro fundamental de la UE”, así como en la necesidad de “evitar que se meta en el mismo saco a terroristas e inmigrantes”.

De Kerchove aludió a la dificultad de “recopilar pruebas” contra los presuntos terroristas, para lo que “hace falta tener acceso a las comunicaciones electrónicas”.

Sin embargo, planteó que “mucha de esa información se encuentra en Estados Unidos” y que la UE “no puede esperar meses y meses para obtener las pruebas de esos procesados”, por lo que es necesario “establecer un diálogo con las autoridades norteamericanas y empresas que cuentan con esos datos”.

En cuanto a la prevención en Internet, afirmó que “todavía queda mucho trabajo por hacer”, y dijo que “hay que formar aún más a los expertos para detectar las señales tempranas de radicalización”.

Por otro lado, pidió a la Comisión Europea (CE) que impulse programas de lucha contra la islamofobia, especialmente entre los jóvenes.

“El islam europeo es un tema tabú, pero no debemos olvidar que hay 20 millones de musulmanes en Europa y hay que ayudares para que puedan vivir dentro de su religión de manera tranquila y compatible con los valores de la Unión Europea”, concluyó.