La corrupción y la crisis motivan el apoyo a Podemos en Andalucía por encima del castigo al bipartidismo

El estudio demoscópico, realizado entre el 8 y el 31 de enero sobre una muestra de 1.200 entrevistas telefónicas en toda Andalucía, recoge por primera vez un apartado especial dedicado a las formaciones emergentes, no sólo a Podemos, sino también a Ciudadanos, que preside Albert Rivera, y revela que los dos partidos obtienen el respaldo de sus simpatizantes por muy diferentes motivos.

En el caso de Podemos, que según ha dicho la directora del Cadpea, Carmen Ortega, tiene un electorado que se está “afianzando”, el 96,2 por ciento de los encuestados que apoyan o simpatizan con esta formación contestaron que les ha movido a ello, como razón “muy o bastante importante” la corrupción política, un 93,3 por ciento respondieron que la crisis económica, y un 87,5 por ciento dijeron que sus propuestas económicas y sociales. Para un 85,9 por ciento es muy o bastante importante la ideología del partido, para el 82,6 lo es el liderazgo de Iglesias, y finalmente el castigo a los partidos mayoritarios, para el 74,7.

Para el simpatizante o posible votante de Ciudadanos es “muy o bastante importante” su ideario o programa político, para un 89,9 por ciento, seguido del liderazgo de Rivera, para un 88,8, la corrupción política, para un 87,9, la crisis económica, para un 85,8, la trayectoria del partido, para un 69,7, y el castigo a partidos mayoritarios, para un 63,6 por ciento.

Preguntados por la coherencia en los planteamientos económicos y políticos de Podemos, los simpatizantes de Podemos entrevistados para el Egopa consideran que son “bastante o muy coherentes”, concretamente un 71,3 por ciento, mientras que para el 18,6 los ve “poco o nada coherentes”.

En lo que respecta a su programa político, la propuesta que obtiene mayor nivel de consenso, con porcentajes superiores al 96 por ciento, es la paralización inmediata de los desahucios de primera vivienda y locales pequeños de empresarios; seguido de las propuestas de reformas de la Constitución, con un 91,3; el impago de la deuda, con un 83 por ciento, y por último la recuperación de niveles estratégicos de la economía, con un 72,2 por ciento.